Remesas desde EE.UU. bajarían $30.1 millones en 2026 por impuesto del 1%, según estudio
El impuesto a las remesas enviadas desde EE.UU. entrará en vigencia a partir de 2026, El Salvador, México y Guatemala tienen un alto riesgo de ser afectados, tanto en reducción de envíos como en bajas en el monto, dice un estudio de Bancolombia citado por Bloomberg.
septiembre 13 | 5:10 am
Por Tania Urías
Según la publicación de la revista económica Bloomberg, el nuevo impuesto del 1% a las remesas desde EE.UU., que comenzará a aplicarse en 2026, afectará con mayor intensidad a Centroamérica, aunque en términos de dinero el mayor impacto se sentirá en México por el alto volumen de recursos que recibe por esta vía.
En el caso de México, la proyección es que las remesas desde EE.UU. se contraigan un 0.33% en 2026, pero dado el gran flujo de dinero que se mueve a través de este canal el impacto combinado sería de $207.8 millones.
De acuerdo a la publicación, El Salvador también tiene una vulnerabilidad alta al impacto de este gravamen.
La nota indica que la caída esperada de las remesas que se envían desde EE.UU. hacia El Salvador es de 0.39%, con un efecto combinado en el total de $30.1 millones menos de lo proyectado para 2026.
«Los analistas de Bancolombia consideran que el efecto agregado sobre las remesas generaría pérdidas diferenciales en el consumo de los hogares de los países analizados», explica la nota.
«México y El Salvador, por su parte, verían una disminución en sus remesas de 0.1 porcentuales del consumo privado», detalla el informe. «A pesar de que estos países también son vulnerables, la exposición de sus migrantes ante deportaciones frente al número de indocumentados empleados es menor que la de Guatemala».
En promedio, explican en el reporte de Bancolombia y citado por Bloomberg, las transferencias desde EE.UU. hacia Colombia, México, El Salvador y Guatemala se reducirían un 0.38% como consecuencia del impuesto.
En Guatemala, las divisas enviadas desde EE.UU. caerían en 2026 un 0.48%, lo que en cifras absolutas representa una reducción de $95.9 millones frente al total proyectado.
«Además, mayores deportaciones derivarían en una pérdida en la llegada de remesas de unos 0.5 puntos porcentuales del consumo privado guatemalteco.
Se estima que las transferencias enviadas por migrantes documentados en EE.UU. hacia México, El Salvador, Guatemala y Colombia en 2024 sumaron $74.636 millones, mientras que las enviadas por indocumentados totalizaron $21.815 millones. cita la nota.
Remesa.
Foto EDH/ AFP
Por industrias, la construcción y las actividades profesionales son las que tienen una mayor participación en las transferencias de migrantes indocumentados.
De acuerdo al reporte de Bancolombia, la política migratoria de Trump tiene una incidencia directa en las economías latinoamericanas, especialmente por su impacto sobre los migrantes indocumentados, «quienes son los más expuestos a medidas de detención y deportación»
Los analistas ven que «esta situación es particularmente crítica» si se considera que México concentra el mayor número de personas indocumentadas (4.3 millones), seguido por Guatemala y El Salvador (850,000 cada uno), y Honduras (775,000).
Además, explica la nota, para 2023, más de la mitad de la fuerza laboral migrante en EE.UU. era de origen latino, representando el 52.4% de los trabajadores nacidos en el extranjero.
México fue el principal aportante, con un 45.0% del total de la mano de obra latinoamericana, seguido por el Caribe con un 18.9% y Sudamérica con un 18.3%.
La previsión de los analistas de Bancolombia es que la administración de Trump no logre deportar un millón de personas al año, como aseguró el Gobierno a principio de año.
Sin embargo, «bajo un escenario pesimista en el que las deportaciones hacia México, Guatemala, El Salvador y Colombia superen en un 50% las registradas en 2024, los resultados serían mixtos.
Países más vulnerables
De acuerdo al reporte de Bancolombia, liderado por la economista Laura Clavijo, los países de Centroamérica son los más vulnerables debido a su alta dependencia económica de las remesas y a la proporción de estos envíos provenientes de EE.UU.
«A esto se suma que los problemas de seguridad en la región han llevado a una migración sostenida hacia Estados Unidos en los últimos años», dice el documento de Bancolombia.
Remesa.
Foto EDH/ AFP
Según la nota, Bancolombia elabora un indicador de vulnerabilidad de flujos de remesas desde EE.UU., en una escala de O a 10, los territorios más expuestos a estos cambios son precisamente México, Centroamérica y el Caribe.
El índice de alta vulnerabilidad se destaca para México, con una calificación de 6.5, El Salvador con 6 y Honduras con 5.6.
Para Guatemala la vulnerabilidad es media, con un índice del 4.9, Nicaragua con 4.3 y República Dominicana con 2.9.
Ecuador (1.9), Colombia (1.4), Costa Rica (1.1), Brasil (0.9), Perú (0.9), Chile ( 0.5) y Argentina con un riesgo cero, están en el nivel de vulnerabilidad baja.
Analistas de Bancolombia explicaron a la revista económica Bloomberg que «las políticas migratorias más restrictivas podrían traducirse en una disminución de los flujos de remesas hacia los países de origen, lo que afectaría directamente a millones de hogares que dependen de estos ingresos».
Dinero Foto / Cortesía FGR.
Aunque al considerar el escenario en el que los receptores asumen todo el costo del impuesto, «su efecto sobre las remesas es más bien bajo», dice la publicación.
Bloomberg detalla que, para Colombia, se proyecta una contracción en el envío de remesas desde EE.UU. de 0.32% el próximo año, representando en el total un golpe de $20.3 millones.
El pasado 4 de julio se aprobó la ley One Big Beautiful Bill Act, que establece, entre otras medidas, un impuesto del 1% a las remesas enviadas por canales físicos a partir de 2026.