El próximo 12 de diciembre, el Campus 1 de la Universidad Dr. José Matías Delgado se convertirá en un espacio de inspiración y colores vibrantes con la realización del Festival AMARTE, una iniciativa impulsada por AMARTE por Lula Mena que busca transformar la vida de cientos de niñas mediante procesos creativos y emocionales.

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El encuentro, que se desarrollará de 9:00 a.m. a 3:30 p.m., es más que una jornada de talleres: es un manifiesto sobre la importancia de que cada niña pueda conectar con su esencia, descubrir su valor y expresarse con libertad. “Creemos en un mundo donde cada niña y cada mujer reconoce su valor, conecta con su esencia y elige vivir desde el amor”, señalaron los organizadores en un comunicado que resume la visión que impulsa este movimiento.

Gracias al convenio anual entre AMARTE y la UJMD, el festival cuenta con el apoyo de estudiantes pasantes que se integran como voluntarios. Ellos aportan acompañamiento, entusiasmo y manos dispuestas para hacer de esta experiencia un espacio seguro, cálido y memorable. Su participación, además, forma parte de sus horas sociales y su formación profesional, convirtiéndolos en aliados del proceso transformador que la organización promueve.

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A lo largo del día, las niñas participarán en talleres de arte pensados para guiar su autodescubrimiento. Cada actividad está diseñada para invitar a explorar emociones, trabajar la autoestima y desarrollar una conexión más profunda con su identidad. El arte se convierte así en un puente hacia el interior: una herramienta para descubrir su voz, reconocer su valor, romper barreras internas y expandir su potencial creativo y personal.

Desde AMARTE, la apuesta es clara: el arte puede sembrar cambios duraderos. Por ello, sus experiencias integran autoconocimiento, expresión artística y herramientas prácticas que acompañan el crecimiento integral de niñas y mujeres. Se trata de procesos que combinan sensibilidad y técnica, emoción y aprendizaje, imaginación y acción.

“Soñar, conocerse, amarse y florecer” es la semilla que la organización planta en cada encuentro. Y el Festival AMARTE es la prueba de que, cuando el arte se comparte desde el corazón, puede abrir horizontes donde antes solo había límites.