Anna Wintour rompe el silencio sobre el rol de Meryl Streep en “El diablo viste a la moda”
La exeditora de Vogue habló por primera vez sin reservas sobre la icónica película que desde 2006 ha sido considerada un retrato, aunque no oficial, de su figura.
Han pasado casi dos décadas desde que El diablo viste a la moda llegó a los cines en 2006 para convertirse en un fenómeno cultural. Protagonizada por Meryl Streep, Anne Hathaway y Emily Blunt, la cinta marcó un antes y un después en la forma de retratar el mundo de la moda en Hollywood. Y aunque nunca se ha presentado como una biografía oficial, el personaje de Miranda Priestly ha sido constantemente asociado con la legendaria Anna Wintour, ex editora en jefe de Vogue.
En una reciente entrevista con David Remnick para The New Yorker, Wintour habló abiertamente sobre lo que piensa de la película y sobre la caracterización que Meryl Streep llevó a la pantalla.
“Fui al estreno con Prada, sin tener ni idea de qué iba a tratar la película. La industria de la moda estaba dulcemente preocupada por mí, porque pensaban que me iban a retratar de manera difícil”, recordó entre risas.
Lejos de sentirse incómoda, Wintour confesó que la cinta le resultó brillante: “Me pareció muy divertida y muy entretenida. Tenía a Meryl Streep, tenía a Emily Blunt… todas eran increíbles. Al final, pensé que era una buena oportunidad”.
Durante años, se especuló qué tanto de la temible Miranda Priestly reflejaba a la verdadera Wintour. El periodista Remnick describió al personaje como “caricaturesco”, algo con lo que la propia Anna coincidió. No obstante, destacó la interpretación de Streep, calificándola de “justa” y llena de ingenio.
Eso sí, la editora aclaró que algunos de los momentos más recordados del filme no correspondían con la realidad de la redacción de Vogue. Uno de los ejemplos más célebres es la línea de Miranda: “¿Por qué no puedes hacer que las cosas se muevan más rápido?” A lo que Wintour respondió con humor: “Nadie en Vogue se mueve a un ritmo glacial, y menos mis asistentes”.
Con estas declaraciones, Anna Wintour no solo desmonta algunos mitos que la rodean, sino que también confirma lo que muchos sospechaban: que, más allá de las comparaciones, El diablo viste a la moda es una película que incluso ella disfruta como parte de la cultura pop.
