“No hubiéramos aprendido a manejar bicicleta si alguien en quien confíábamos no nos hubiera soltado”, decía el cartel sobre un atril. Es la vida que nos suelta a temprana edad para conquistar nuestro destino y libertad. En la cuesta, caídas o tropiezos iremos aprendiendo. En la mitología griega la Esfinge -monstruo con cuerpo de león, enormes alas y rostro de mujer- plantea a Edipo Rey un enigma mortal: «¿Qué ser tiene una voz, camina en cuatro patas por la mañana, dos al mediodía y tres por la noche?». De no resolver el enigma Edipo sería aniquilado por la feroz criatura del destino. Entonces el legendario rey descifra el enigma con estas palabras: “Es el ser humano: gatea en cuatro patas en la infancia; camina erguido sobre dos en la adultez y usa un bastón como tercera pata en la vejez.” Al resolverlo, la Esfinge, vencida, se suicida lanzándose al vacío. Con ello libera al reino de Tebas, pero no a Edipo de su trágico destino, como relata la mitología griega. Al ser desterrado de niño por el imperio, Edipo había sido enviado al desierto. El ejecutor decide no matarlo pero lo deja con sus pies atados. Por ello se conoce como “Edipo”: “el de los pies hinchados”. Mitológico rey de Tebas, hijo de Layo y Yocasta. El mismo que no escapa de su trágico destino ya que, sin saberlo, mató a su propio padre en una batalla y desposó a su madre, a quien desconocía. ¡Lección de un rey y una bicicleta! “El Sueño de las Palabras”Libro ilustrado de C.B .Físico y digital. Pedidos: arteditores7@gmail.com