Entre los crímenes que cometieron se encuentran el asesinato de los hermanos Guerrero Toledo y el de la futbolista Jimena Granados.
Entre los crímenes que cometieron se encuentran el asesinato de los hermanos Guerrero Toledo y el de la futbolista Jimena Granados.

El Tribunal Quinto Contra el Crimen Organizado de San Salvador impuso condenas de hasta 1,393 años de prisión contra más de 200 miembros del programa Libertad de la Mara Salvatrucha (MS-13), tras declararlos culpables de 235 hechos delictivos cometidos entre los años 2014 y 2022 en distintos sectores de La Libertad.
La jueza determinó la responsabilidad de los imputados por delitos como homicidio agravado, feminicidio agravado, desaparición de personas, extorsión, tráfico ilícito, proposición y conspiración en homicidio, utilización u ocupación ilegal de inmuebles, tenencia y portación ilegal de armas de fuego, así como agrupaciones ilícitas, detalló el reporte judicial.
El pandillero que recibió la pena más alta fue Marvin Abel Hernández Palacios, alias “Nocturno de Teclas”, condenado a 1,393 años de cárcel por su participación en más de 20 casos de homicidio agravado y extorsión, entre ellos el asesinato de los hermanos Guerrero Toledo y el de la exfutbolista de Alianza Women, Jimena Granados.
Otro de los condenados fue Kelvin Edgardo Germán Rivas, alias “Sapa”, sentenciado a 873 años de prisión por su implicación en 14 homicidios agravados y 12 desapariciones de personas.
Durante el proceso judicial también fueron sentenciados 13 líderes de la MS-13, quienes ejercían como corredores de clica y de programa dentro de la estructura criminal. Tres de ellos recibieron 45 años de prisión por su rol de liderazgo.
La resolución judicial estableció que las 14 bases de la MS-13 que ejercían control territorial en Santa Tecla fueron juzgadas.
Además, se resolvieron casos mediáticos, como el asesinato de Luis Alberto Menjívar Vides, estudiante de la UCA, quien fue interceptado cuando iba a realizar una diligencia a la casa de un amigo en la colonia Los Cipreses de Santa Tecla, por el cual se impuso una condena de 30 años de prisión a los responsables.

Con las pruebas presentadas por la Fiscalía General de la República, 214 pandilleros de la MS-13 recibieron distintas condenas.
De estos, 17 fueron sentenciados a 130 años de prisión por la desaparición y homicidio de los hermanos Guerrero Toledo, ocurrido en diciembre de 2021, y 11 recibieron condenas de 75 años por la desaparición y asesinato de la futbolista Jimena Granados, cometido en octubre del mismo año.
En total, los procesados enfrentaron cargos por 43 homicidios agravados, 42 desapariciones de personas, tres feminicidios, 86 casos de extorsión, 29 casos de proposición y conspiración en homicidio, 32 procesos por actos preparatorios de tráfico ilícito, además de otros delitos relacionados con la ocupación ilegal de inmuebles, detalló la FGR.
Las investigaciones establecieron que los pandilleros extorsionaban a comerciantes y empresarios, exigiendo pagos a cambio de permitirles trabajar sin atentar contra sus vidas, y que además distribuían drogas en diferentes sectores de La Libertad.
En general, entre los condenados figuran corredores de clica, homeboys, chequeos, observadores, «paros» y colaboradores de las clicas TLS y Ayagualos Locos Salvatruchos, Areneras Locos Salvatruchos, entre otras.
Asimismo, el tribunal informó que 34 pandilleros más fueron condenados en ausencia, amparados en las reformas al Código Procesal Penal que permite juzgar a los imputados aunque no estén presentes.

Sobre el caso Guerrero Toledo y futbolista
En septiembre de 2021, los hermanos Karen y Eduardo Guerrero Toledo desaparecieron en Santa Tecla cuando abordaron un transporte privado y no se supo más de ellos hasta que sus cuerpos fueron hallados diciembre de ese año en una fosa clandestina de la finca Suiza en Nuevo Cuscatlán.
«Las víctimas presentaban lesiones en la cabeza, extremidades y abdomen», señaló el informe.
Los restos fueron sometidos a pruebas de ADN que confirmaron que se trataba de los hermanos Guerrero Toledo. Ambos fueron asesinados por pandilleros de la MS-13.
Durante el fallo estuvo presente la madre de las víctimas, quien había manifestado estar en la condena de los sujetos que le quitaron la vida a sus hijos.

Mientras que el caso de Jimena Granados ocurrió el 24 de octubre de 2021 en la colonia Quezaltepeque, distrito de Santa Tecla, cuando desapareció luego de separarse del grupo con el que se encontraba para ir a una tienda cercana a la cancha donde jugaba.
En ese momento, fue interceptada por los pandilleros, quienes pertenecían a la clica Teclas Locos Salvatruchos, del programa Libertad de la MS-13.
El tribunal determinó que la víctima fue privada de libertad y posteriormente asesinada y enterrada en la finca Suiza.
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