Las infecciones respiratorias agudas (IRA) han mostrado una tendencia a la baja durante las últimas seis semanas, según el más reciente Boletín Epidemiológico del Ministerio de Salud (MINSAL).
El infectólogo Jorge Panameño confirmó que este año se ha registrado una reducción significativa en los casos de enfermedades respiratorias; sin embargo, advirtió que la población no debe relajarse, ya que aún circulan virus como la influenza A y B, el virus sincitial respiratorio y el metapneumovirus, este último con síntomas similares a un resfriado común, pero que puede derivar en complicaciones graves como bronquitis o neumonía.
“Estos virus comienzan a circular con mayor fuerza entre octubre y marzo, coincidiendo con la temporada de invierno en el hemisferio norte”, explicó el especialista.
De acuerdo con el MINSAL, actualmente las infecciones respiratorias se mantienen dentro de la “zona de éxito” del corredor epidemiológico. No obstante, al menos 11 municipios presentan una afectación moderada, principalmente en el departamento de Usulután, mientras que cuatro municipios más registran afectación leve. Los datos corresponden a la semana epidemiológica 42, que comprende del 12 al 18 de octubre.
Neumonías a la baja
Al igual que las IRA, los casos de neumonía han mostrado una reducción sostenida durante más de seis semanas. En lo que va del año, se contabilizan 11,579 pacientes atendidos por esta causa.
El grupo más afectado continúa siendo el de niños menores de cinco años, quienes acumulan más de 6,000 consultas a nivel nacional.
De los pacientes atendidos, al menos 11,000 requirieron hospitalización debido a complicaciones derivadas de la enfermedad.
Aunque las autoridades de salud no han detallado el número de fallecidos por neumonía, informaron que la enfermedad mantiene una letalidad del 2.8%.
Importancia de la vacunación oportuna
Panameño recordó que cada año El Salvador recibe miles de visitantes, especialmente compatriotas procedentes de Estados Unidos, Canadá y Europa, lo que incrementa el riesgo de ingreso de virus respiratorios.
“La vacuna tetravalente aplicada en octubre o noviembre es fundamental porque genera defensas contra dos tipos de influenza A y B”, destacó el médico.
La vacuna contra la influenza puede aplicarse desde los seis meses de edad, y los niños menores de cinco años deben ser prioridad, ya que suelen ser quienes introducen el virus en sus hogares. También recomendó vacunar al personal de salud, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas que debilitan el sistema inmunológico.
“Algunas personas creen que la vacuna provoca influenza, pero eso no ocurre porque se aplican tarde, cuando el virus ya circula. La vacuna está hecha de fragmentos del virus, no de virus vivos”, aclaró Panameño.
El infectólogo además sugirió que El Salvador exija vacunación previa a los viajeros provenientes del hemisferio norte.
“Toda persona que venga debería estar vacunada contra la influenza y si la situación se agudiza también debería estar vacunado contra enfermedades como la tosferina o el sarampión”, recomendó.
Según el especialista, estas medidas podrían ser clave para prevenir brotes y proteger a la población frente a los virus respiratorios estacionales. Recordó que tras la aplicación de la vacuna, el cuerpo necesita al menos 14 días para desarrollar una protección efectiva.
“No se trata solo de vacunarse, sino de hacerlo en el momento adecuado. Las estrategías de vacunación deben planificarse antes de que los virus comiencen a circular para obtener mejores resultados”, concluyó.