Las importaciones salvadoreñas procedentes de la República Popular China registraron un fuerte incremento en 2025, al crecer en más de $880 millones en comparación con el año anterior. 

Este comportamiento consolida al país asiático como el segundo mayor socio comercial de El Salvador en términos de importaciones, solo por detrás de Estados Unidos, y confirma una tendencia sostenida de mayor dependencia de bienes provenientes de ese mercado.

Según datos del Banco Central de Reserva (BCR), entre enero y octubre de 2025 las importaciones desde China sumaron $3,060 millones, frente a los $2,179.2 millones registrados en el mismo período de 2024. El aumento interanual fue de $880.8 millones, uno de los mayores crecimientos observados en los últimos años dentro del comercio exterior salvadoreño.

Este dinamismo en las compras externas ha tenido un impacto directo en la balanza comercial bilateral. Según el BCR, a octubre de 2025 El Salvador acumuló un déficit comercial de $3,011.8 millones con China, resultado de un elevado volumen de importaciones frente a exportaciones que apenas alcanzaron $48.2 millones en el mismo período.

En términos simples, el país le vende al gigante asiático apenas el 1.5 % de lo que le compra.

China, segundo proveedor de El Salvador

En el ranking de los principales socios comerciales por valor de importaciones, China ocupa el segundo lugar. Entre enero y octubre de 2025, El Salvador importó desde Estados Unidos $3,844 millones, mientras que las compras a China alcanzaron $3,060 millones. 

Más atrás se ubicaron Guatemala, con $1,386.7 millones; México, con $1,185.5 millones; y Honduras, con $616.2 millones.

La tendencia al alza en las importaciones chinas no es reciente. Las estadísticas del BCR muestran que las compras a ese país pasaron de $1,153.3 millones en 2020 a $3,060 millones en 2025, lo que evidencia un crecimiento sostenido durante los últimos cinco años.

Este comportamiento responde, entre otros factores, a la mayor demanda de bienes de consumo, maquinaria, equipos electrónicos e insumos industriales, que suelen encontrarse en el mercado chino a precios competitivos. 

¿Qué le compra El Salvador a China?

Dentro del top diez de productos importados desde China destacan, en primer lugar, los teléfonos celulares. Solo en octubre de 2025 se importaron más de $24 millones en estos dispositivos, mientras que en los primeros diez meses del año las compras acumuladas ascendieron a $211.7 millones.

En segundo lugar figuran productos clasificados por el BCR como «poliacetales, los demás polieteres y resinas epoxi, en formas primarias», insumos utilizados principalmente en la industria manufacturera y en procesos de ingeniería. De este tipo de productos se importaron más de $10.4 millones únicamente en octubre, destinados sobre todo a fábricas que elaboran bienes en serie.

El tercer lugar lo ocupan las construcciones y sus partes, clasificadas en la partida arancelaria 7308, que incluye puentes y sus componentes, torres, pilares, estructuras metálicas para techos, puertas y ventanas, barandillas y otros elementos de hierro o acero. En octubre, las importaciones de este rubro alcanzaron $6.6 millones.

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Otros productos relevantes dentro de los primeros diez lugares son máquinas para procesamiento de datos, lectores magnéticos, productos laminados, hierro y acero sin alear, partes y accesorios de vehículos, monitores y proyectores, así como vehículos y motocicletas. 

Estos dos últimos registraron una participación significativa: entre enero y octubre se importaron $56.6 millones en vehículos (sin datos para agosto) y poco más de $30 millones en motocicletas.

El 0.84 % que exportamos

Aunque China es un socio clave en términos de importaciones, su peso como destino de las exportaciones salvadoreñas es limitado. De la cifra total de enero a octubre, 6,692.5 millones, solo un 0.84% tiene como destino a China.

Del total exportado a ese país, el 77 % corresponde a azúcar de caña o de remolacha, con un valor de $37.2 millones. En segundo lugar se ubican los suéteres, pullovers, cárdigans y prendas similares de punto, con $6.7 millones, y en tercer lugar los desperdicios y desechos de aluminio, con apenas $1.4 millones.

El resto de los diez principales productos exportados a China no supera el medio millón de dólares cada uno, lo que confirma la escasa diversificación y bajo volumen de las ventas hacia ese mercado.

En los últimos cinco años, las exportaciones a China se han mantenido relativamente estables, con la excepción de 2023, cuando se registró una caída pronunciada. En 2021 y 2022 se exportaron poco más de $46 millones anuales; en 2023 las ventas se redujeron de forma significativa; en 2024 repuntaron a $51.5 millones, y en 2025 volvieron a bajar a $48.2 millones.

Pese al crecimiento constante de las importaciones, la industria salvadoreña aún no logra posicionarse de manera sólida en el mercado chino, lo que plantea el desafío de fortalecer la oferta exportable y reducir la brecha comercial.