Sobre la incapacidad de remontar marcadores adversos por parte de la Selección, Ramón Fagoaga abonó: «Mucha gente me dice que juega por diversión, pero no, te voy a contar algo sobre cómo jugaba yo. Jugaba por mi comida, así que cuando juegas por tu comida, sabes que si no ganas, tu comida está en riesgo», contó.

«Obviamente, perdí muchas veces, pero mi intención era ganar. ¿Y saben por qué? Porque en mi casa había una quiebra y había muchas necesidades.

«Así que quería jugar al fútbol; me abrió las puertas para salir adelante en la vida. Lo vi como una oportunidad. Creo que así fue como avanzamos».

«Tienes que estar muy confiado, la comunicación entre compañeros es importante también, el interesarme por su vida, sus problemas.

«El grupo debe ser unido porque es lo que necesitamos para sabernos reponer, aunque nos gritemos fuerte; que sea todo siempre para ayuda».

«Hay momentos en los que el entrenador está presente, pero también hay momentos en los que los jugadores tienen que tomarse su tiempo, sus propias conversaciones. Como no estoy en la selección, no puedo decirte si lo hacen, si lo viven».

«Nunca es fácil remontar, es como un golpe en la nuca».

«Así que hay cosas que no se pueden hacer por falta de capacidad. Y no es culpa de los jugadores, es la capacidad que tienen, ¿sabes? Claro, es lo que hay, como dicen».