La Selecta salvadoreña tuvo un 2025 más agrio que dulce en sus participaciones oficiales y amistosas. Pasó por un cambio de técnico que no mejoró ni su imagen ni idea de juego y terminó, como casi siempre, llorando sobre la leche derramada lo que no supo defender sobre el terreno de juego.

En febrero, el técnico colombiano Hernán Darío «Bolillo» Gómez se hace cargo de la Selecta, con el aval del entonces presidente del Instituto Nacional de los Deportes (Indes), Yamil Bukele, en el camino rumbo a la Copa Oro y a la última fase de la eliminatoria para el Mundial de Norteamérica 2026.

El deporte salvadoreño de la A a la Z: un repaso de 2025

«Esta designación de «Bolillo» responde a un proyecto a largo plazo. El nuevo cuerpo técnico asumirá sus funciones de inmediato, enfocándose en los próximos compromisos internacionales que enfrenta nuestra selección», explicó la Fesfut en un comunicado emitido en redes sociales.

Poco más de un mes después, el 19 de marzo, «Bolillo» debuta con una derrota (2-1) frente al Houston Dynamo, de la que se repone, tres días después, con un empate a uno con el Pachuca mexicano.

Y tras tres partidos más (dos empates y una victoria), llega una Copa Oro de la que se despidió con más pena que gloria. Dos derrotas (Honduras y Canadá) y un empate sin goles (Curazao), cero goles a favor y en el último lugar del grupo.

Llegó septiembre, y con él toda la ilusión de la afición en un nuevo camino rumbo a una Copa del Mundo. Comenzó con ilusión, con un triunfo sorpresivo sobre Guatemala, de visita, con gol de Harold Osorio.

Pero luego vino la debacle, cinco derrotas consecutivas, algo que jamás le había pasado a la Selecta, que comenzó el calvario en el Cuscatlán con derrota ante Surinam (1-2), cuatro días después de derrotar a los chapines; y siguió con la caída ante Panamá (0-1) y Guatemala (0-1), para terminar goleada, y en el fondo de la clasificación, ante Surinam (4-0) y Panamá (3-0).

Un año amargo en el que jugó 14 partidos, entre amistosos (3) y oficiales, ganó dos, empató 4 y perdió ocho, todos bajo la conducción del técnico colombiano, que, al final del año, y en medio de la polémica por su celebración con los jugadores panameños en el Rommel Fernández después de golear a la Selecta, recibió el espaldarazo para el 2026.

Hernán «Bolillo» Gómez, técnico de la Selecta

«No es un fracaso nuestro. El fracaso viene de mucho antes. Nosotros vinimos a iniciar un trabajo que apenas comienza. El fracaso no está en este momento»