Fallece Romeo Galdámez, precursor de la impresión digital en el arte y la memoria visual en El Salvador
El fallecimiento del artista Romeo Galdámez conmociona al gremio cultural. Su legado de medio siglo, marcado por ser el gran precursor del grabado y la gestión artística, deja una huella imborrable.
Esta foto fue compartida por Cinquera TV para anunciar la muerte del talentoso artista visual Romeo Galdámez. Foto: imagen de carácter ilustrativo y no comercial / https://www.facebook.com/photo?fbid=1739366943718718&set=a.782947469360675
El Salvador y su natal Cinquera despiden este lunes 29 de diciembre a una de sus figuras más luminosas: el maestro Romeo Galdámez.
Su inesperada partida, a los 69 años, fue comunicada por Cinquera TV, y generó un profundo pesar en la comunidad artística, que reconoce en él al gran precursor y renovador del grabado y los sistemas de impresión digital como arte en el país, además de un gestor que dignificó este sector como herramienta de identidad.
El maestro falleció de forma repentina en la tierra que lo vio nacer, en el departamento de Cabañas, en donde se encontraba de visita. La familia y amigos cercanos indicaron que murió tras sufrir un ataque al corazón.
Con 50 años dedicados a las artes visuales, Galdámez presentó su libro conmemorativo trilingüe en 2025, una obra que reúne memorias y reflexiones de su carrera global.
Más que un catálogo, el libro testimonia su evolución como observador y pensador que dialogó con paisajes y culturas de diversos continentes, como se lee al ingresar a su sitio web.
Galdámez es recordado como el principal impulsor de la gráfica contemporánea en El Salvador. Tras estudiar en el Centro Nacional de Artes (1972-1974), obtuvo una beca para la Universidad Federal do Río Grande do Sul, en Brasil, donde se licenció en Artes Plásticas en 1979.
Fue en Porto Alegre donde profundizó en el grabado, técnica que luego transformaría en un lenguaje universal capaz de dialogar con la memoria y la historia.
Su trayectoria internacional se consolidó en México, donde residió por más de dos décadas (1981-2003). Allí fundó su estudio-taller, proyectando su obra hacia Estados Unidos, Canadá y Europa, siempre manteniendo un compromiso con la experimentación visual.
Al regresar definitivamente a El Salvador en 2003, Galdámez asumió un rol vital en la gestión pública. Se desempeñó como coordinador de Artes Visuales en CONCULTURA.
Imagen de archivo del maestro Galdámez (c) en el lanzamiento de su libro este año, en el Marte. Foto / cortesía Julio Ávalos
Luego, tuvo a su cargo la Dirección Nacional de Artes en la Secretaría de Cultura y fue director de Promoción Cultural en el Ministerio de Relaciones Exteriores hasta su jubilación en 2022.
Además de su labor institucional, fue un formador generoso e incansable. Su disciplina y sensibilidad marcaron a generaciones de estudiantes, a quienes enseñó que el arte es, ante todo, un ejercicio de conciencia y reflexión humana.
Cinquera, su tierra, lo honra hoy como un «hijo ilustre» que llevó el nombre del municipio y de El Salvador a los escenarios más prestigiosos del mundo, tal y como lo posteó la cuenta de Facebook de Cinquera TV.
Aunque su ausencia física duele, su legado permanece vivo en cada estampa, en cada clase impartida y en el impulso que dio al grabado salvadoreño.
Descanse en paz, maestro Romeo Galdámez. Su obra continuará hablando por usted.
