Deuda pública aumentó $1,715.1 millones en once meses
La deuda del Sector Público No Financiero (SPNF) de El Salvador continuó su tendencia al alza y cerró noviembre de 2025 con un saldo de $32,613.2 millones, lo que supone un incremento de $1,715.1 millones frente a diciembre de 2024, cuando ascendía a $30,898.1 millones
Por Tania Urías
Publicado el 30 diciembre 2025 - 5:43
Foto de referencia.
El incremento no solo se refleja en términos de montos, sino también en el peso que la deuda ejerce sobre la economía. El indicador de endeudamiento pasó de 87.4 % del Producto Interno Bruto (PIB) al cierre de 2024 a 89.1 % del PIB a noviembre de 2025.
En términos prácticos, esto implica que por cada $100 que produce la economía salvadoreña, el país adeuda $89, lo que reduce significativamente el margen fiscal para inversión en salud, educación, infraestructura y programas sociales.
Si se excluyen las obligaciones previsionales, la deuda pública también mostró un crecimiento relevante. El saldo de la deuda sin pensiones aumentó $999.9 millones, al pasar de $20,372.2 millones en diciembre de 2024 a $21,371.2 millones a noviembre de 2025.
Deuda externa lidera el crecimiento
Por su composición, la deuda externa fue el principal factor que explicó el aumento del endeudamiento.
Esta pasó de $12,922.4 millones a $14,541.6 millones en el período analizado, equivalente al 39.7 % del PIB. De ese monto, $13,535 millones corresponden al gobierno central, $600.5 millones a empresas públicas no financieras y $405.8 millones al resto del gobierno general, detalla Hacienda.
En contraste, la deuda interna registró una reducción, al pasar de $6,092.0 millones a $5,602.9 millones. El gobierno concentra casi la totalidad de este saldo, con $5,130.4 millones, equivalentes al 14 % del PIB, mientras que el resto corresponde a empresas públicas no financieras.
En conjunto, la deuda del SPNF de mediano y largo plazo alcanzó los $20,144.5 millones, lo que representa aproximadamente el 55 % del PIB.
A estas cifras se suman los instrumentos de corto plazo. Las Letras del Tesoro (LETES) totalizaron $1,130.8 millones, mientras que los Certificados del Tesoro (CETES) alcanzaron $96.8 millones, lo que supone una reducción cercana a $156 millones respecto a diciembre de 2024.
En cuanto a los acreedores, los inversionistas privados continúan concentrando el mayor peso del endeudamiento, con $11,303.5 millones, equivalentes al 56.1 % del total. No obstante, el financiamiento multilateral mostró un aumento relevante, al pasar de $6,215.7 millones a $7,334.2 millones.
El país también mantiene compromisos por $1,077.9 millones con el Banco Central de Reserva (5.4 %), $349 millones con entes bilaterales (1.7 %) y $79.9 millones con otros acreedores.
Altas tasas y riesgos
El costo del endeudamiento continúa siendo uno de los principales focos de presión fiscal. El 34 % de la deuda paga tasas de interés entre 6 % y 8 %, mientras que al menos una tercera parte registra tasas superiores al 9 %, lo que encarece el servicio de la deuda y complica su sostenibilidad a mediano plazo.
Además, la estructura de vencimientos plantea riesgos adicionales: alrededor del 25 % de la deuda vence en los próximos cinco años y otro 22 % entre seis y diez años, lo que implica fuertes presiones de liquidez, en un contexto donde el Estado sigue recurriendo a nuevo financiamiento para cubrir déficits fiscales y obligaciones previsionales.
Una parte sustancial del aumento del endeudamiento proviene de la deuda previsional, que continúa creciendo de forma acelerada. Hasta noviembre de 2025, las obligaciones por pensiones alcanzaron los $11,241.1 millones, equivalentes al 30.7 % del PIB, con un incremento de $715.2 millones respecto al cierre de 2024.
Esta carga no solo aumenta año con año, sino que también exige pagos constantes, reduciendo el espacio fiscal disponible.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha reiterado que el sistema previsional actual es insostenible y ha insistido en la necesidad de una reforma estructural. Aunque el Gobierno ya presentó el estudio actuarial —con tres meses de retraso—, este sigue siendo apenas un primer paso para definir cambios de fondo.
Endeudamiento histórico
Un análisis publicado por El Diario de Hoy en mayo de 2025 reveló que la deuda pública ha crecido casi un 70% durante la administración del presidente Nayib Bukele, un ritmo más del doble que el registrado en las dos administraciones anteriores.
En términos comparativos, el aumento de la deuda bajo el actual gobierno es 243 % mayor al observado durante la administración de Mauricio Funes (2009–2014), cuando el endeudamiento subió $4,663.9 millones. Actualmente, el 41 % de toda la deuda pública acumulada del país corresponde a la gestión vigente.
BCR
El Salvador cierra 2025 con una economía presionada por una deuda pública que prácticamente iguala al PIB, tasas de interés elevadas y obligaciones previsionales crecientes, un escenario que plantea serios desafíos para la sostenibilidad de las finanzas públicas en los próximos años.