Vuelos con deportados de EE.UU. ya superaron todos los de 2024
l total de vuelos con salvadoreños retornados desde Estados Unidos hacia El Salvador llegó a 148 entre enero y octubre de 2025. Esta cantidad ya es superior a la reportada en el mismo periodo del año pasado cuando hubo 108. Expertos aseguran que esto no necesariamente se traduce en aumento de cifra de deportados
En 10 meses de 2025 la cantidad de vuelos con deportados desde Estados Unidos (EE.UU) hacia El Salvador ya sobrepasó la cantidad registrada durante todo el 2024.
Los registros Human Rights First, una organización que por varios años ha brindado información sobre los vuelos realizados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de los Estados Unidos, reflejan que entre enero y octubre de este año las autoridades estadounidenses han autorizado 148 vuelos con salvadoreños deportados.
La viceministra de Diáspora y Movilidad Humana, Cindy Portal, confirmó el pasado 11 de noviembre que El Salvador ha recibido 145 vuelos federales desde Estados Unidos con un total de 10,025 salvadoreños deportados.
Solamente en octubre la organización reportó 16 vuelos hacia El Salvador. Según estos datos, la cantidad aumentó en comparación con los 13 registrados en septiembre. Sin embargo, esta cifra se mantuvo por debajo de los máximos reportados por ICE en los meses de junio y julio cuando hubo 22.
Si los datos se mantienen en los vuelos de noviembre y diciembre de 2025, la cifra se acercará al máximo reportado en el 2022 cuando funcionarios estadounidenses reportaron 184 vuelos con deportados.
Especialistas en temas migratorios fueron consultados sobre el incremento de vuelos con personas deportadas hacia El Salvador. Óscar Díaz, experto migratorio, aclaró que «más vuelos no necesariamente refleja un aumento dramático en la cifra de deportados».
Según las cifras de la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) entre enero y septiembre de 2025, un mes antes de lo contabilizado en los vuelos, hubo 10,162 salvadoreños retornados hacia el país, la mayoría provenían de Estados Unidos. En el mismo período de 2024 la cifra fue superior: 11,461 de salvadoreños deportados.
En cuarta posición
El país se encuentra por debajo de Guatemala, Honduras y México en cuanto a número de vuelos internacionales con deportados.
Óscar Chacón, asesor de estrategias de Alianza Américas (un conglomerado de organizaciones que estudian el tema migratorio en EE.UU.), mencionó que es normal que el país se encuentre en esta posición, ya que es una de las naciones que tiene más personas residiendo sin autorización migratoria en Estados Unidos: «no es sorprendente que El Salvador esté efectivamente viendo más de sus nacionales arrestados y deportados desde los Estados Unidos», indicó.
Añadió que esa situación explica el incremento en el número de vuelos de personas deportadas y aseguró que según los registros hay más personas de Guatemala y de Honduras que han sido deportadas en este mismo periodo. «Esto puede que se deba a que los grupos guatemaltecos y hondureños son simple y sencillamente más vulnerables al arresto, la detención y la deportación», apuntó.
Las órdenes judiciales
Óscar Díaz sostiene que existe una narrativa de funcionarios de la administración Trump de desafiar órdenes judiciales de tribunales federales «y eso es lo que se conoció la semana pasada, que el Departamento de Justicia admitió que fue la secretaria de Seguridad Nacional, Kristy Noem, quien dio la orden que continuaran los vuelos hacia El Salvador con venezolanos, pese a una orden de que regresaran a territorio estadounidense», mencionó.
Agentes federales patrullan los pasillos del tribunal de inmigración en el Edificio Federal Jacob K. Javitz en la ciudad de Nueva York.
Foto EDH/AFP
Por su parte, Chacón aseguró que lo que se está observando en este país es una disputa política en la que se tiene la idea que el Ejecutivo tiene «preeminencia para aplicar leyes migratorias versus la lógica de sistemas de verificación por medio del sistema judicial o las cortes migratorias».
El asesor de estrategias de Alianza Américas dijo que Estados Unidos vive bajo un gobierno que cree que el presidente tiene poderes ilimitados para llevar a cabo áreas como la política de inmigración.
«Pareciera que los fallos emitidos por las Cortes Federales parecieran importarle muy poco a la administración Trump. Y como hemos visto también la administración Trump es muy dada a desarrollar apelaciones, presentar mociones de apelación a las decisiones hechas por cortes inferiores ante la Corte Suprema de Justicia», declaró.
Los deportados desaparecidos
Human Rights First ha denunciado en sus informes la desaparición forzada de personas sin el debido proceso, y que incluso han sido enviados al Centro del Confinamiento para el Terrorismo (CECOT). Así como el traslado forzoso de personas a países de los que no son ciudadanos, tal es el caso de los vuelos con venezolanos ocurridos en marzo de 2025.
La organización menciona que la administración Trump ha realizado al menos 21 vuelos con ciudadanos de terceros países a 10 lugares, entre estos: Costa Rica, El Salvador, Esuatini, Ghana, Guatemala, Honduras, Panamá, Ruanda, Sudán del Sur y Uzbekistán.
«La legalidad de estos traslados, en particular sin previo aviso ni la oportunidad de impugnarlos por temor a la persecución, está siendo cuestionada actualmente en los tribunales federales de Estados Unidos», cuestionan desde la organización.
Chacón considera que un gobierno extranjero por medio de su representación consular o de representación diplomática en otro país debería de tener la facultad de poder saber qué está pasando con los nacionales de su país en un territorio extranjero.
Añadió que en el caso de El Salvador nunca han sido un gobierno que haya defendido a sus nacionales en el exterior y cuestionó que exista «una actitud prácticamente cómplice del Gobierno salvadoreño cuando vemos casos como el de Kilmar Ábrego García, donde repiten las afirmaciones hechas por el gobierno de Donald Trump sin que haya ninguna prueba para respaldar declaraciones a efecto de que alguien como Kilmar Ábrego García era miembro de una pandilla o incluso era un terrorista».
En el país existen otros casos de salvadoreños que fueron deportados a El Salvador y que incluso inicialmente no se sabía nada sobre su paradero. El Diario de Hoy ha documentado el proceso de seis de estos, de los cuales cinco han sido denunciados ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Al respecto, el asesor de Alianza Américas aseguró que actualmente se vive un momento en el que el gobierno de Donald Trump arremeterá contra todas las personas nacidas en el extranjero, «especialmente de países indeseables».
«Estamos en un momento de enorme vulnerabilidad, donde más allá de que una figura política como Nayib Bukele se considere amigo de una figura controversial en Estados Unidos como Donald Trump, eso no trasciende de ninguna manera a un beneficio tangible para los nacionales que residen en Estados Unidos», comentó Chacón.
Al contrario, el experto en temas migratorios advirtió que el hecho que los salvadoreños sean uno de los más numerosos en situación irregular en Estados Unidos es probable que exista una «intensificación del patrón detenciones, desapariciones, deportaciones y probablemente personas que opten por la autodeportación como acto desesperado ante un entorno sumamente hostil, que es la realidad en la que vive un extranjero especialmente de América Latina en la actualidad en Estados Unidos».