No todos los jugadores de la Primera División de fútbol de El Salvador tienen la misma «suerte» o viven en condiciones medianamente equitativas. Pero esto no tiene que ver directamente con las diferencias salariales que existen, unas obvias. Más bien, la lupa se pone para conocer la realidad más allá del torneo en cuestión, sea el Apertura o el Clausura.

Porque una vez terminados estos, muchos futbolistas dejan de percibir sus salarios. Hay futbolistas a quienes les pagan doce cuotas (por cada mes del año) en diez meses, a otros les hacen efectivo el pago mencionado repartido en los doce meses. Como sea, ante la sombra eterna de los impagos, todos los jugadores buscan distintos métodos para poder sobrevivir a como dé lugar.

EDH Deportes habló con dos perfiles distintos, un futbolista recientemente retirado y otro quien aún se encuentra en actividad, ambos con paso por la Liga Mayor de fútbol. Ambos hablaron sobre lo que hacen, o hicieron, en ese periodo donde no hay actividad en el circuito de privilegio para poder asegurar la supervivencia en lo que se reanudaban las acciones para el siguiente certamen futbolero.

El propósito de este artículo es para resaltar los esfuerzos del jugador, quien no espera de brazos cruzados a que esta o aquella situación financiera se resuelva «por arte de magia» sino que con el esfuerzo propio, ingenio y fe son capaces de esquivar aquellos obstáculos que las circunstancias de la vida les plantean a veces de presto, y otras veces con cierta anticipación.

Anthony Roque es un jugador quien surgió de las reservas del Alianza Fútbol Club y quien luego pasó por varias otras escuadras como Aspirante de Jucuapa, Sonsonate, Firpo, Marte, Once Deportivo, Chalatenango, San Salvador FC (de la Liga Indes), Santa Tecla y Platense, su actual equipo.

«Tengo mi negocio propio gracias a Dios, siempre he tratado de hacer la diferencia y no quedarme solo con el futbol, porque acá en nuestro país no es muy rentable por la tardanza de pagos y todo eso».

«Pues lo proyectado siempre es mi negocio, yo paso la mitad del día en mi negocio y la otra mitad entrenando con el equipo, tengo esa facilidad de no depender del futbol»

«Varios tienen visa y muchos se van a usa a trabajar a jugar y eso les genera incluso más de lo que puedan ganar en sus equipos»

Aquí lo interrumpimos para decirle que es curioso que estos quienes viajan para jugar informalmente no se animan a quedarse en los Estados Unidos para hacer fútbol de forma permanente, a lo que responde con un contundente: «Pues por sus familias, supongo».

«Tengo una como ferretería. Soy el dueño (risas) hago de todo».

Dicho emprendimiento, según registros de El Diario de Hoy, data desde hace más de tres años. «En realidad, siempre he sido una persona a la que le gustan mucho los negocios. Pero, la verdad, está idea no fue solo mía. Susy, la mamá de mi hijo, fue quien me motivó a hacerlo, por medio de su papá, quien le dio la idea», declaró en 2022.

Afuera de las canchas

Como bien anticipamos, también platicamos con un exfutbolista, quien por cierto, no tiene mucho tiempo de haberse retirado y se trata de un talento joven que no está más en la Liga Mayor de fútbol. Hablamos de Álvaro Alexis Ardón, defensor y volante de varios conjuntos en dicho certamen.

Ardón inició su andar en Turín FESA, más tarde pasó por entidades como Atlético Comalapa, Chalatenango, Firpo. Se desempeñó como defensor y volante de marca, colgó los botines antes de que cumpliera los 30 años de edad. Ahora vive su día a día muy lejos del balompié profesional pero con buen humor y la perseverancia que le ha caracterizado siempre.

«En mi caso fue que trataba de ahorrar cierta cantidad de dinero que me pueda alcanzar para lo que empezaba el siguiente torneo, pero prácticamente eso es lo que hacía, porque no tenía otra fuente de ingresos. Prácticamente el tiempo que estuve estudiando, se terminaba el torneo y yo seguía estudiando y con mis ahorros trataba de pasarla, pero eso fue lo que ocurrió en mi vida».

«Para ser sincero mi papá toda su vida, quizás, ha tenido ganado. Poco, pero siempre ha tenido; entonces cuando yo no estudiaba le ayudaba a él y ahí pasaba. El tiempo de ‘descanso’ en los torneos lo utilicé para ir a trabajar, pero más para ayudar e invertir mi tiempo que para sobrevivir. Gracias a Dios no me vi en la necesidad, porque también no tenía la responsabilidad de un hogar como tal, esposa, hijos, o algo por el estilo».

«Yo estudiaba con mi padre, entonces ahí pasaba, pero muchos compañeros que si les tocaba, pues ejercer o buscarse o irse para Estados Unidos. Quizás lo más extremo que escuché en ese momento cuando jugaba al fútbol en la Primera, pues, que hubo compañeros quienes trabajaban de ayudante de albañil. Unos incluso vendían tenis, otros ropa y así fueron quizás los casos que yo más conocí, que fueron así. Porque ahí la mayoría, quizás igual muchos vivían con los papás (lo que les ayudaba a sobrevivir) y a otros que les tocaba irse para el Norte un mes, un mes y medio para a trabajar allá, a trabajar y a regresar cuando ya estaba a punto la pretemporada o el inicio de la temporada. Pero prácticamente eso, también otros de los que yo escuché, pues, de ayudante de albañil, otros en ganado también y así».

«Muchas veces (me invitaron a jugar en EE.UU.) casi siempre a finalizar los torneos, pero no tenía visa, entonces siempre dije que no. No porque a lo mejor hubiera sido una buena opción, por la realidad que nosotros vivimos en el país, no por la necesidad que nos enfrentamos nosotros. A lo mejor muchas veces no es porque no se quiera o porque no se sea profesional, sino que por la crisis que vive el fútbol aquí, por la necesidad a la que se enfrenta el futbolista, pues toca hacer algo por la familia, por sobrevivir y esa es una forma».

«¿Qué hacía yo cuando le ayudaba a mi papá con el ganado? Bueno, ordeñaba, alimentarlos, cuidarlos, vacunarlos, los cuidados normales. Ahí pasaba yo en eso, junto con él, ayudando en todo lo que estuviera a mi alcance, porque no era que yo sabía todo para encargarme por completo del ganado, no. Pero sí que aprendía también distintas actividades para apoyarle».