Los elementos de Cruz Verde Salvadoreña informaron que este miércoles fue localizado el cuerpo sin vida de Roberto Espinoza, de 24 años, un joven reportado como desaparecido el pasado 29 de septiembre, luego que su lancha quedara volcada en las costas de la playa Garita Palmera, en Ahuachapán Sur, del departamento de Ahuachapán.

De acuerdo con el informe emitido, desde tempranas horas, reanudaron las labores de búsqueda, junto a los equipos de la Marina Nacional y pescadores de la zona, ya que, llevaban dos días buscándolo y no habían tenido resultados favorables.

El cadáver fue hallado al medio día, entre Guatemala y El Salvador, según indicó Cruz Verde. «El cadáver fue encontrado por familiares y pescadores en la costas de la zona limítrofe entre El Salvador y Guatemala. Autoridades se encuentran en la zona de Garita Palmera realizando el debido proceso legal», detalló.

Cabe mencionar que desde ese 29 de septiembre, sus familiares, cuerpos de socorro, amigos y pescadores realizaron incansables labores de búsqueda para poder dar con su paradero.

«Se ahogó un compañero de pesca de aquí, de la Garita Palmera y todavía no se ha podido encontrar el cuerpo sin vida del pescador desaparecido. Andamos varias lanchas, pescadores y toda la gente de aquí hemos andado buscándolo por todos lados, ya que, el muchacho era un pescador humilde», fueron las palabras expresadas hasta esta mañana, por uno de los pescadores que se unió a la búsqueda.

Según indicaron, pescadores anduvieron en varias lanchas buscándolo, también contaron con el apoyo de los socorristas de Cruz Verde Salvadoreña seccionales Barra de Santiago y Santa Ana, quienes fueron alertados de la desaparición, luego que según testigos, su lancha volcara en horas de la mañana.

El 30 de septiembre, tres guardavidas a bordo de la unidad acuática empezaron las labores de búsqueda en la zona, pero no lograron localizarlo. Hasta esta mañana reactivaron el operativo junto a los equipos de la Marina Nacional.

Sus compañeros contaron que el muchacho se encontraba al altamar cuando la fuerza de una ola causó que su lancha diera vuelta y él ya no se volvió a ver. Piensan que una corriente marina pudo haberlo arrastrado.

Asimismo, contaron que las labores de búsqueda fueron cansadas, pero continuaron hasta localizarlo. Sin embargo, la preocupación crecía a medida que pasaban las horas sin noticias de su paradero.

«La misión primero Dios, es encontrarlo y si no lo encontramos hoy, la búsqueda sigue mañana», dijo otro pescador, unas horas antes de hallarlo.