Para representantes de varias asociaciones de la sociedad civil, la transparencia es fundamental si se quiere hablar de un Estado moderno y eficiente, sobre todo porque en el país se está en una etapa de transición entre la forma tradicional de hacer política y el auge de los controles ciudadanos sobre los asuntos públicos.
Esta fue parte de las conclusiones del tercer día de la Semana de la Transparencia, un evento donde participó Matías Bianchi, director y fundador de la organización Asuntos del Sur, quien reconoció que la transparencia no debe de ser vista como una bandera política de la izquierda o la derecha sino como una herramienta para buscar soluciones a los problemas del país.
“La sensación de corrupción está agrupando diferentes sensaciones en la población, la transparencia no puede ser nuestro objetivo político sino que un medio de acción para tener un Estado más eficiente, más moderno y sobre todo crear soluciones a los problemas estructurales de la sociedad”, dijo Bianchi.
Por su parte Claudia Umaña, directora ejecutiva de la Fundación Democracia, Transparencia y Justicia (DTJ) explicó que la sociedad está en una transición de una etapa donde la participación se limitaba a la observación a otra donde la ciudadanía esta exigiendo, en los tres órganos del Estado, más resultados y políticas.
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“Hoy la gente esta entendiendo que si uno no trabaja en el sistema, en enfrentar la corrupción desde la raíz, en las elecciones se va a cambiar de cara pero no la realidad, este es un peligro en el que estamos por la polarización. Y creo que para modernizar el estado se requiere de un trabajo más coordinado entre el gobierno y la sociedad civil”, aseguró Umaña.
No obstante para esto Bianchi advirtió que la sociedad debe de salir de la comodidad en la que se encuentra y fomentar la construcción de una cultura de la transparencia, aunque esto requiera un relevo generacional.
Por otra parte Emma García-Prieto, directora de la asociación CREO, dijo que el salvadoreño debe de romper las barreras de no ir a votar y luego hacerlo con pensamiento crítico para evitar que lleguen al poder candidatos con débiles credenciales políticas y sin propuestas.
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“Yo estoy convencida de que la cultura de la transparencia se debe de fomentar transformando nuestro metro cuadrado, cambiando nuestras actitudes y razonando al máximo nuestro voto para elegir a políticos que apoyen la lucha contra la corrupción y defiendan la transparencia”, indicó García-Prieto.
Sobre la corrupción Eduardo Lovo, miembro de Espacio Ciudadano, subrayó que la base de la corrupción sigue siendo el miedo de algunas personas para no ir a la cárcel y que están dispuestas a sacrificar a todo un país para lograr sus objetivos.
“Antes de señalar a los políticos también hay que revisar la solvencia moral de las personas, pero esta claro que en el país la transparencia y la participación de la sociedad van de la mano con un cambio de conducta de los ciudadanos”, finalizó Lovo.