Fitch confirma la elevada deuda de la alcaldía de San Salvador

Una calificadora de riesgo también confirma que la deuda es de $67 Mlls. y que hay un déficit operativo de $9.3 Mlls.

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Mercado Cuscatlán. Con un pago mensual de $85,000 a la sociedad Desarrollo Universal S.A. de C.V., la alcaldía de San Salvador mantiene un contrato de arrendamiento a 25 años plazo por un inmueble cuyo costo no sobrepasa los $1.5 millones. Muyshondt dice que buscará comprarlo.

Por Juan Morales

11 May 2018

La administración del ex alcalde de San Salvador, Nayib Bukele, dejó en una complicada situación financiera a la comuna y, según la calificadora de riesgo Fitch Ratings su endeudamiento “es elevado” en unos $67 millones, algo que está generando un déficit en sus operaciones por tener más gastos que ingresos durante el período 2015-2017.

La agencia emitió un informe en los últimos días de la gestión de Bukele luego de evaluar, con cifras oficiales de la alcaldía, la capacidad de cumplimiento de las obligaciones financieras de la municipalidad, ya que a mediados de 2015 realizó una titularización de $61.9 millones para reestructurar deuda bancaria, pagar las titularizaciones que se hicieron en las dos administraciones del ex alcalde Norman Quijano y saldar montos con la banca comercial.

“Se estará monitoreando la capacidad tanto para servir a esta emisión oportunamente como para cumplir con los acuerdos estipulados en sus diferentes obligaciones financieras, dado que se considera que el nivel de endeudamiento actual de la Alcaldía Municipal de San Salvador (AMSS) es elevado”, dice el informe de Fitch, de fecha 30 de abril de 2018.

Esta emisión de deuda se ha hecho en cuatro tramos que suman $55.3 millones, además de los $31.3 millones que emitió, entre 2009 y 2015, Quijano, cifras que generan un déficit real estimado en $30 millones y una brecha entre ingresos y gastos de $9.3 millones, según cifras que publica Fitch en su informe.

El alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, explicó a El Diario de Hoy que la cifra real de la deuda puede incluso rondar los $270 millones porque se deberían de incluir todos los contratos que firmó su antecesor y la deuda no contable con proveedores que brindaron diferentes bienes y servicios a la comuna capitalina.

“La deuda es más alta si uno toma en cuenta todo el tema de los proveedores y todos los pagos que se están haciendo por deuda, intereses y muchos contratos que no son favorables a la comuna, son temas que tenemos que revisar para tener más claridad”, dijo.

Muyshondt afirmó que están preparando un informe y una auditoría sobre este tema y consideró que la única salida es impulsar un riguroso plan de austeridad y de eficiencia de gestión para no contraer más deuda y destinar más dinero para pagar a proveedores, bancos y otros acreedores.

El documento de Fitch confirma que en los últimos tres años la administración municipal ha funcionado con déficit. En 2015 el monto era de $200,000, en 2016; $6.7 millones y en 2017;$9.3 millones, según cifras de la alcaldía usadas por Fitch para su informe.

La calificadora también destacaque la alcaldía de San Salvador tiene un bajo saldo de dinero de libre disposición, ya que al cierre de 2017 reportó $550,000 miemtras que en 2016 tenía $1.7 millones. Esto condiciona su estructura de gastos y la posibilidad de tener saldos positivos para sus operaciones porque entre 2016 y 2017 el egreso destinado a pago de créditos y servicio de deuda es de $12.1 millones.

“Fitch considera que la AMSS tiene una estructura de gastos elevada e inflexible, situación que limita la obtención de saldos positivos”, recalca la agencia.

Uno de los factores que determinaron toda esta situación financiera es la la firma de múltiples contratos a largo plazo con diferentes empresas y personas para realizar proyectos municipales, lo cual suma un monto de $110 millones.

Proyectos como la iluminación pública con lámparas LED ($24.2 millones), el arrendamiento del inmueble del mercado Cuscatlán a 25 años ($25.5 millones) y la compra de nuevos camiones recolectores de basura ($3.3 millones) , más la titularización, dan una deuda mayor a la contabilizada por Fitch.

Estos contratos a largo plazo, según el alcalde, generan una deuda mayor pero que la alcaldía esta analizando la posibilidad de revocarlo porque son inconvenientes para las finanzas municipales.

Bukele dijo, el pasado 1 de mayo en el acto de traspaso de mando a Muyshondt, que dejaba una reserva de $212 millones, pero los balances y las cifras de la comuna retomadas por Fitch no confirman el dato y demuestran que lo que existe es un déficit entre ingresos y egresos.

Fitch no ha reducido la calificación de riesgo de la emisión y la mantiene con una perspectiva estable a largo plazo pero advierte que la deuda directa esta distribuida en un 72.9% en emisiones, 17.7% con entidades financieras supranacionales, 5.5% con la banca local y apenas un 3.3% con el gobierno central, incluyendo una deuda de $11.8 millones en dos créditos con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), cifras que pueden condicionar el desempeño de la comuna.