Los lápices de la icónica marca Facela con los que la mayoría de salvadoreños escribieron sus primeras letras o pintaron las tareas en sus inicios escolares, ahora tienen más de 60 años de trayectoria.
¿Quién no recuerda aquel comercial de “sácale la puntita y pinta cosas bonitas”? de los reconocidos colores Caribe de Facela.
Seis décadas después Facela es una pujante empresa a nivel local, en Centroamérica y el Caribe.
El empresario salvadoreño José Escobar, recuerda que compró Facela en 1991, siendo una empresa que había nacido en 1962, fundada por un italiano.
La firma que Escobar adquirió hace más de 30 años tenía entonces un portafolio limitado de 11 productos, especialmente lápices, crayones y material de escritura; hoy en día no solo ha ampliado su oferta de productos sino que una de sus apuestas es abrir oficinas en Estados Unidos, para llegar al mercado nostálgico salvadoreño y centroamericano.
La apuesta es abrir en la zona de Maryland y Virginia, donde vive gran cantidad de compatriotas. “No solamente podemos vender lápices, podemos vender muchas cosas más, es un mercado pujante”, destacó José Escobar.
El empresario apuntó que esa es una las metas a corto plazo de la empresa y, de ser posible, la nueva oficina comenzaría a operar en el segundo semestre de 2018.
Cuando se adquirió, dice el ejecutivo, la empresa tenía dos épocas de venta: el inicio del año escolar salvadoreño y el del sistema americano, con clientes tradicionales como las librerías, en esos periodo se daba el 70 % de sus ventas.
Escobar sin conocer mucho del mercado y tras vencer muchos obstáculo, junto con sus colaboradores, se aventuró a ampliar sus líneas de producción y comercialización que ahora llegan a más de 5,000 artículos, los cuales se venden en más de 12 países. Además, se poseen oficinas en Guatemala y Costa Rica.
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En la actualidad comercializan todo tipo de lápices, artículos de escritura para oficina y comercio, así como productos plásticos para el hogar .
Los lápices de grafito y de color, borradores y reglas son los productos más buscados por los clientes. Ahora cuentan con herméticos, productos de limpieza y pelotas.
El material escolar domina el 50 % de su producción y en área local tiene más del 50% de participación de mercado. También ofertan papel bond, marcadores, resaltadores, bolígrafos y otros.
“Es una marca nostálgica porque es nuestra, pero en realidad es de toda Centroamérica”, menciona Delia Rodríguez, gerente general de Facela.
La innovación comenzó con los tradicionalmente conocidos como plumones, crayones y plastilina, que se elaboraban de una manera tradicional, pero luego dieron paso a nueva tecnología y a la automatización de procesos para hacerle frente a la competencia.
Pero, Facela ya atendía a todo Centroamérica cuando automatizó sus operaciones, ahora han expandido sus ventas a México y el Caribe.
A la fecha, la firma exporta 45 % de su producción, sus clientes más grandes están en Guatemala y Costa Rica, y tienen expectativas de crecer dos dígitos en sus exportaciones este año, sin descuidar el mercado local.
“Lo más valioso para una empresa es el mercado local. Cuando uno hace un buen trabajo en el mercado local y tiene la capacidad para exportar, es una empresa que crece”, destacó el empresario.
Escobar señaló que la empresa también ha innovado con maquinaria para impresión y prácticas de producción que no contaminen el medio ambiente, de modo que sus productos no sean tóxicos sobre todo porque van orientados a infantes.
Las materias primas provienen de Estados Unidos, en su mayoría plástico y resinas. Otros insumos vienen de Europa, además tienen proveedores locales de empaques.
“La industria en El Salvador está tan diversificada que tratamos que aquellas cosas que podemos comprar localmente sean aquí”, mencionó Escobar.
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Recibirán premio industrial
José Escobar recibirá este jueves el premio principal que entrega la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), por su trayectoria.
El Premio ASI se entrega por la gremial a empresarios que considera han sumado a la industria y a la economía del país. “Después de más de 50 años en el mercado y ser un icono para El Salvador realmente nos sentimos orgullosos, no hay muchas empresas así”, detalló.
“Lo valioso de nuestra empresa y proyectos es nuestra gente, realmente es la base de nuestro progreso”, agregó el empresario originario de Santa Rosa de Lima.