La Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades) fue reconocida como el principal tanque de pensamiento de Centro América, según el Índice Global “Go To Think Tank 2017”, elaborado por la Universidad de Pennsylvania en Estados Unidos y cuyos resultados provienen de una encuesta internacional que realiza entre más de 7,500 académicos, donantes públicos y privados, legisladores y periodistas que, a su vez, clasifican a más de 6,600 tanques de pensamiento en el mundo.
Desde 2011, Fusades ha destacado en el ranking de dicho informe.
Entrevista: Miguel Ángel Simán: “No podemos quedarnos callados. Tenemos que señalar lo que hay que mejorar”
Este año, por primera vez también está incluido entre los mejores tanques de pensamiento a nivel mundial en la categoría “Best Use of Media”.
Fusades salió mejor posicionada que centros de investigación como la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de Chile, que ocupa la posición 62 a nivel de América Latina.
El informe evalúa una serie de programas de políticas públicas en 60 ciudades y 50 países que explora el papel crítico que juegan los tanques de pensamiento en los gobiernos y las sociedades civiles en el mundo.
El trabajo involucró a más de 100 tanques de pensamiento, organizaciones intergubernamentales, periodistas, legisladores y políticos.
De acuerdo con el presidente de la Junta Directiva de Fusades, Miguel Ángel Simán, este logro es un reconocimiento a su equipo de más de 135 profesionales que realizan exhaustivos estudios sobre la realidad nacional.
También es un reconocimiento a los cooperantes que mantienen su confianza en esta institución, que este año cumple 35 años de trayectoria. “También es un reconocimiento al patrimonio intelectual de los salvadoreños”, agregó.
Entrevista: Roberto Murray Meza: “El principal aporte de Fusades al país es mantener un diálogo contínuo”
Fusades destaca, incluso, entre otros tanques de pensamiento con mucho más presupuesto.
“Muchas de ellas están vinculadas a universidades importantes y en países muchos más grandes, con presupuestos más grandes y financiados con recursos del sector público”, afirmó Simán.
Fusades, que fue fundada en 1983, se define a sí misma como una organización privada de desarrollo sin fines de lucro con una estrategia de trabajo que promueve propuestas de política pública en los campos económicos, social, político, legal e institucional, las cuales son presentadas a la sociedad salvadoreña para su debate y discusión.
Por su parte Roberto Murray Meza, presidente fundador de Fusades, también se mostró orgulloso de la calificación aunque reconoció no sorprenderle, debido al profesionalismo que éste ha desarrollado desde sus inicios.
Recientemente, la Fundación firmó un convenio para constituir la Red Internacional para combatir la corrupción en América Latina, en donde, junto a ocho centros de estudios líderes de distintos países del continente conformaron la Red Anticorrupción Latinoamericana (REAL) que busca promover reformas institucionales para que los estados cuenten con mejores herramientas para la prevención, detección, investigación y sanción de los delitos de corrupción.
Y aún así, Murray Meza cree que los campos de investigación para Fusades pueden seguirse ampliando. “Ciertamente, en el área de las finanzas públicas que son un gran reto para nuestro país Fusades deberá de continuar fortaleciendo su capacidad de análisis y su capacidad de propuestas. En el área social particularmente en los sectores de salud y educación las brechas que existen en El Salvador deberán de continuar siendo materias de estudio y de propuesta de Fusades.
Para el fundador de este organismo, Fusades aún tiene mucho trabajo por delante.
“Nuestro país continua siendo una sociedad dividida y polarizada y organismos como Fusades tienen la responsabilidad de trabajar en el campo de la reconciliación nacional. Este reto lo deberá enfrentar Fusades en asocio con otros organismos e instituciones que sepan trabajar con objetividad, visión y solidaridad”, acotó.
El top de los think tank
En América Latina, sin incluir a México, el tanque de pensamiento que se posicionó en el puesto número uno fue la Fundación Getúlio Vargas de Brasil, en segundo lugar Fedesarrollo de Colombia y, en tercera posición, el Centro Brasileiro de Relaciones Internacionales.
Asimismo, a nivel mundial el think tank que ocupó la primera posición fue Brookings Institution de Estados Unidos, le siguió French Institute of International Relations (Francia) y, en tercer lugar, Carnegie Endowment for International Peace de Estados Unidos.