Las elecciones internas del 22 de abril, que dejaron como candidato presidencial al arenero Carlos Calleja, han dejado fisuras que deben cerrarse por completo de cara a los comicios de 2019, según coincidieron representantes de la sociedad civil.
José Miguel Fortín, presidente de Movimiento Libertad; Federico Hernández Aguilar, de Aliados por la Democracia, y Jorge Daboub, de la organización DECIDE, participaron ayer en el foro “Camino a la Presidencia”, donde aseguraron que si ARENA no busca eliminar sus divisiones interna, los números no les serán favorables para recuperar la presidencia del país.
Según Fortín, desde los comicios internos del partido de oposición, pareciera que “han quedado dos partidos ARENA distintos”, algo que ha dejado “fracturas” entre los areneros. “Si la dirigencia no entiende esto, las fracturas se van a continuar profundizando”, sostuvo.
En tanto, Daboub enfatizó que ARENA tiene un reto: entender que si mantiene las divisiones internas no le alcanzarán los apoyos para febrero de 201. “Los riesgos son inmensos. ARENA tiene ocho meses para las elecciones. Yo no estaría tan tranquilo como a veces veo a alguna gente de ARENA”, acotó.
A juicio de Hernández Aguilar, ARENA ha sido un partido “que no ha aprovechado su ventaja competitiva” ni ha podido “administrar” algunas ventajas que ha tenido en eventos electorales.
En esa misma línea, Fortín fue de la idea que los resultados de las elecciones del pasado 4 de marzo no deben ser color de rosa para el partido tricolor, quien obtuvo 37 diputados contra 23 de ganó el partido oficial. “Me parece que ARENA está siendo miope. Una cosa es que yo gane a que el otro pierda. Parece que es lo mismo pero no lo es”, expresó.
“Es momento de trabajar y esto no se consigue con matonería”, dijo Fortín, en relación a algunas expresiones de simpatizantes de determinados candidatos internos dentro del partido tricolor. “Esto se consigue con una verdadera reconciliación. Debemos tener la capacidad de discernir”, agregó.
Entre otros aspectos, Hernández Aguilar sostuvo que el caso del FMLN es peculiar con relación a su forma tradicional de elegir a sus candidatos, en vista del proceso en el que participan.
Pero la preocupación de otros como Daboub va más allá, pues asegura que el FMLN será un actor de tercera fila en esta contienda, por lo que ARENA tendrá que enfrentarse contra el movimiento Nuevas Ideas, impulsado por el exalcalde Nayib Bukele, de llegar a convertirse partido político.
Tanto Hernández como Fortín calificaron a este posible nuevo partido como un movimiento “gelatinoso”. “Este muchacho se está navegando en una bañera gelatinosa. La gente parece compartir con él sin ningún cuestionamiento. Esta deriva es muy peligrosa”, dijo.
Hernández Aguilar, además, sostuvo que el exalcalde estará en aprietos para poder “amalgamar” a distintas vertientes ideológicas que se le han unido, tanto comunistas como socialdemócratas.