Los ciudadanos que estarán en las mesas de votación el próximo 4 de marzo, han estado siendo capacitadas por personal del Tribunal Supremo Electoral (TSE). Las capacitaciones se han centrado en cómo contar los votos y con énfasis en el llenado de las actas de escrutinio preliminar que a criterio de muchos es el “alma” del proceso electoral porque de eso depende la legitimidad y confiabilidad de los resultados de las votaciones.
Precisamente el llenado de las actas preliminares fue lo que “atascó” el escrutinio final en las eleciones de 2015 y ocasionó que se prolongara por más de un mes la acreditación a los diputados que resultaron ganadores en esa elección.
Para evitar esos problemas, el director regional para Centroamérica de Smartmatic, Francisco Campos, consideró recientemente que debe haber una fiscalización de la labor de las JRV por parte de otros entes.
“(Se debe) garantizar la presencia de los fiscales, o miembros de mesa (vigilantes de partidos) para que pueda haber equilibrio como en todo proceso democrático”, manifestó el representante de la empresa venezolana, que tiene a su cargo la transmisión y publicación de los resultados de las votaciones de diputados y alcaldes.
Precisamente a la buena capacitación de los miembros de las mesas electorales en el conteo de votos y llenado de actas preliminares es que le ha apostado el organismo electoral para que hayan resultados electorales fidedignos y confiables.
Finalizada las votaciones a eso de las 5 de la tarde, los miembros de las 9,422 JRV o mesas electorales que se instalarán a nivel nacional comenzrán el conteo de los votos enteros, marcas preferentes y votos cruzados y se los asignarán a los candidatos y partidos políticos que les corresponden.
Todos esos datos los deberán de plasmar en las actas de escrutinio preliminar, así como las incidencias relevantes que ocurran durante la jornada de votación. La misma debe ser firmada por los cinco integrantes de la JRV (ver documento).
“Terminada la votación y en el lugar de la misma, los miembros de las Juntas Receptoras de Votos con la presencia de los vigilantes de los partidos políticos o coaliciones contendientes, levantarán el acta de cierre y escrutinio preliminar...”, señala el artículo 200 de la normativa electoral, que a su vez establece la forma y el orden en que deben hacerlo.
Una vez finalizada esta importante labor de los miembros de las JRV, que en esta ocasión y por primera vez deberán ser personas sin vínculos partidarios viene la fase de transmisiòn y procesamiento de los resultados electorales
Es acá donde el representante de Smartmatic expone la importancia de que las JRV realicen bien su trabajo a la hora de trasladar los datos en las actas
“Si los datos de origen no vienen correctos, nuestro sistema no puede solucionar. El primer filtro es el Tribunal; está situado en las Juntas Receptoras de Votos”, advirtió Francisco Campos, en aquella ocasión.
Y es que los equipos tecnológicos de Smartmatic se nutrirán de la información y datos que aparescan en las imágenes de las actas premilinares que serán enviadas por los escáneres coreanos desde los centros de votación al Centro Nacional de Procesamiento y Transmisión de Resultados Electorales (CNPRE), con sede en el Centro Internacional de Ferias y Comnvenciones (CIFCO) en San Salvador.
Los aparatos de Smartmatic son los que procesarán los datos provenientes de las actas para hacer la sumatoria de los votos y divulgar posteriormente los resultados preliminares al público.