Diputados aplauden decisión de EE. UU. de cancelar visas a corruptos y sus familiares

Legisladores de varias bancadas no pusieron objeción a que Estados Unidos no los deje entrar, como la anunció la embajadora Jean Manes.

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21 September 2018

Diputados de diversas bancadas legislativas dieron su visto bueno a la decisión de Estados Unidos de cancelar las visas de viaje a personas involucradas en casos de corrupción y a sus familiares.

La embajadora de Estados Unidos, Jean Manes, anunció que regresará el fin de semana al país, luego de ser llamada por el Gobierno estadounidense a consulta sobre el tema de la ruptura de relaciones diplomáticas entre El Salvador y Taiwán para abrirlas con China Popular.

Tras esa visita, según dijo, el gobierno de ese país decidió negar las visas a los señalados por corrupción.

Ante esto, el presidente del Congreso, Norman Quijano, reaccionó diciendo que aplaude la medida estadounidense porque la corrupción se debe perseguir a todo nivel.

“Aplaudimos la decisión. Al corrupto hay que perseguirlo aquí y donde sea necesario. No tengo mayor inconveniente en eso. Creo que los niveles de corrupción que hemos tenido en el país deben ser castigados desde todos los ángulos. No tengo mayor objeción sobre eso. Lo aplaudo”, sostuvo.

En forma parecida se pronunció el legislador del PCN, Mario Ponce, al señalar que es una decisión que cualquier país tiene derecho a tomar y que la misma debe servir como un ejemplo para otros países en todo el mundo.

“Es una decisión legítima de cualquier país y, si Estados Unidos dice que no va a ingresar ningún salvadoreño que, obviamente, esté señalado por actos de corrupción o por delitos de narcotráfico o de cualquier tipo… Y creo que debe ser una señal buena para cualquier país del mundo”, aseveró el pecenista.

Aunque el efemelenista Schafik Handal no puso objeciones por el anuncio de la embajadora Manes, sostuvo que hay personas de varios partidos, y acusó a ARENA, que no van a viajar a Estados Unidos, porque están señalados de corrupción.

Mientras, el tricolor Norman Quijano sostuvo que es el partido oficial el que ha querido ocultar la corrupción de la que se le ha señalado.

“Sabemos que el FMLN ha protegido la corrupción. Nunca hemos visto a un funcionario del FMLN que se pronuncie contra los señalamientos que hay sobre corrupción. Hemos visto el caso más grosero de Mauricio Funes”, dijo el arenero.

Ante el tema también dio su punto de vista el presidente del partido ARENA, Mauricio Interiano, para quien la decisión de Estados Unidos es evidente ante los constantes llamados de la embajadora de ese país para detener el avance de la corrupción en El Salvador.

“La embajadora ha sido clara y contundente en su mensaje en contra de la corrupción, nosotros lo estamos haciendo también. En la lucha contra la corrupción tenemos que unirnos todos y no me extraña la posición que está teniendo la embajadora de Estados Unidos”, sostuvo.

En un comunicado, la embajada de Estados Unidos anunció que el jueves concluyeron las consultas del Gobierno estadounidense sobre el tema de las rupturas de las relaciones de El Salvador con Taiwán, las cuales habían sido sólidas desde hace más de 80 años.

El Departamento de Estado señaló, por medio de un comunicado, que a las consultas también fueron convocados los jefes de las misiones diplomáticas de República Dominicana y Panamá, países que también dieron finalizadas sus relaciones con la isla.

En el encuentro se plantearon las distintas perspectivas de EE. UU. sobre cómo continuará colaborando con estos países luego de las rupturas diplomáticas con la isla, decisión que ha sido cuestionada con firmeza por diversos sectores en vista de que, según consideraron, no se dio con la suficiente transparencia.

De inmediato al anuncio de dicha ruptura, por parte de Salvador Sánchez Cerén, autoridades del Senado y el Congreso estadounidenses comenzaron a advertir que dicha decisión podría repercutir negativamente en la ayuda que Estados Unidos está dando al país en diversos programas para el impulso del desarrollo en diferentes áreas.

Algunos analistas, por su parte, dejaron claro que la apertura de relaciones con China Popular podría llenar de incertidumbre económica al país y haría tambalear el Tratado de Libre Comercio con EE. UU.