Las elecciones de alcaldes y diputados del 4 de marzo anterior dejaron un velo de duda a raíz de las fallas en la asignación de escaños por parte de Smartmatic, la empresa transmisora de resultados. Para evitar al mínimo los errores como esos, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) ha programado realizar al menos cuatro pruebas de equipos y un simulacro de transmisión de resultados, de cara a las próximas elecciones presidenciales de 2019.
Lo anterior contempla la transmisión de las actas de escrutinio desde los diferentes centros de votación diseminados en todo el país, la recepción y procesamiento de los datos y la publicación de los mismos.
Todo ello está contenido en el Plan General de Elecciones 2019 (Plagel) que elaboraron los directores de áreas del TSE y que fue avalado por los magistrados de ese tribunal electoral para realizar las pruebas dentro del periodo del 14 de diciembre de este año y el 20 de enero de 2019.
“En esta fase se asegurará la buena operación y el óptimo desempeño del DTR (Dispositivo de Transmisión de Resultados) por medio de una serie de pruebas y simulacros. La fase ejecutará cuatro ciclos de pruebas y un simulacro”, se establece en el Plagel 2019.
Se explica que cada prueba tendrá su especificidad e irá dirigido a detectar alguna falla en determinada fase del proceso de transmisión de los datos electorales.
La primera ha sido denominada “prueba de sistemas”, en la cual se ponen a funcionar todos los sistemas informáticos que se utilizarán y cuya sede central será el Centro Nacional de Procesamiento y Transmisión de Resultados Electorales (CNPRE), que generalmente se instala en el Centro Internacional de Ferias y Convenciones (CIFCO).
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La segunda prueba va dirigida a poner a funcionar todos los equipos informáticos, pero tomando en cuenta el ambiente que realmente va a prevalecer el día de las elecciones del 3 de febrero, es decir, desde los centros de votación (CDV).
Con dicha prueba se pretende obtener los siguientes resultados: Verificar la correcta operación del dispositivo tecnológico; detectar de forma efectiva las debilidades en el ambiente operativo en los CDV; reforzar la capacitación del recurso humano directamente involucrado; familiarización de los encargados con sus puestos de trabajo y actividades; comprobación de las efectividades de los servicios proveídos y afinar la coordinación entre programas, se argumenta en el documento del TSE.
Esta prueba está programada para ser realizada el 16 de diciembre de 2018.
Las autoridades del organismo electoral también han programado hacer una prueba de desempeño.
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“Por ello, es necesario hacer una prueba de carga bajo condiciones extremas de trabajo para medir la capacidad de la infraestructura informática para manejar el procesamiento de la información de forma simultánea”, se detalla en el documento.
Y se añade que “para ello se utilizará la información obtenida en la prueba de transmisión y se colocará a disposición del CNPRE asumiendo que todas las ACE (Actas de Cierre y Escrutinio Preliminar) se procesaron en un mismo momento para comprobar el tiempo en que los sistemas de información pueden procesar este nivel de concurrencia bajo el dimensionamiento implantado”.
Prueba de ataque al sistema informático
La cuarta y última ha sido denominada prueba de seguridad informática y va enfocada a detectar eventuales ataques a los sistemas informáticos.
“El DTR ( Dispositivo de Transmisión de Resultados) será sometido a un análisis de vulnerabilidades para mitigar los riesgos informáticos de la infraestructura y sistemas de información. En adición, se formará un equipo externo, completamente desligado, que realiza el análisis para detectar debilidades por medio de ataques de penetración y denegación de servicios desde una perspectiva externa”, se explica en el Plagel 2019.
Y 15 días previo a los comicios presidenciales del 3 de febrero de 2019, los magistrados del Tribunal electoral han dispuesto hacer un simulacro general y a nivel nacional desde los 1,596 centros de votación que se tiene programado instalar el día de la elección.
Esto último lo pretenden hacer con el objetivo de detectar y afinar los últimos errores o fallas de equipos que puedan surgir, para solventar cualquier problema previo a las votaciones.
“El simulacro se desarrollará desde los CDV de forma similar que las pruebas de transmisión en donde se procesará actas de prueba, su digitalización, transmisión hacia el CNPRE y la producción de los documentos de control. Toda la documentación y ACE (Actas de Cierre y Escrutinio Preliminar)se trasladarán de los CDV a las sedes para luego enviarla al CNPRE”, se plantea en el plan.
En el Plagel 2019 se tiene previsto la posibilidad de una segunda ronda electoral, pero no se tiene programado realizar más pruebas o simulacros si la ocasión amerita acudir una segunda vez a las urnas.
TSE asumirá esa labor
A diferencia de las pasadas elecciones de alcaldes y diputados que el Tribunal Supremo Electoral contrató a la empresa de origen venezolano Smartmatic para el procesamiento y transmisión de resultados preliminares, para las próximas elecciones presidenciales el TSE no buscará contratar a otra empresa, sino que ha dispuesto asumir esa responsabilidad.
Smartmatic experimentó fallas en la asignación de varios escaños legislativos, lo que provocó cuestionamientos y denuncias públicas por parte de candidatos y partidos políticos.
Ante ello, los magistrados del TSEhan dicho reiteradamente que con los 1,800 scanner que les donó la Asociación Mundial de Organismos Electorales (A-web, por sus siglas en inglés) y con el software coreano que se utilizaron en los pasados comicios se hará el trabajo.
De hecho, todos esos equipos y sistemas informáticos el TSE los puso a trabajar paralelamente a los de Smartmatic para que recabaran datos a manera de prueba y para consumo interno del Tribunal.
Los magistrados Fernando Argüello, Miguel Ángel Cardoza y Ana Guadalupe Medina han asegurado a los periodistas en diversas ocasiones que el equipo y el software coreanos funcionaron adecuadamente y que se echará mano de ellos para los próximos comicios.
No obstante, para los comicios presidenciales de 2019 el Tribunal electoral deberá contar con apoyo tecnológico de otras pequeñas empresas que tendrán que ser contratadas. Para el rubro de Transmisión y Divulgación de Resultados Preliminares, el Ministerio de Hacienda y la Asamblea Legislativa le aprobaron al TSE $4.582,979.