Este país está en venta. ¿Quién ofrece más dinero?

La buena gente en este suelo, la mayoría de salvadoreños, no da puñaladas por la espalda, no finge amistades, no olvida a sus amigos y no le mueve bajos intereses. Sepan nuestros leales amigos en el mundo que los buenos salvadoreños estamos avergonzados por lo sucedido.

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22 August 2018

El canciller de la República de China en Taiwán, Joseph Wu, reveló que los efemelenistas les exigieron una exorbitante suma de dinero para su campaña, según citan varios medios. Además les demandaron una gran cantidad de dinero, según alegaron, para el Puerto de La Unión, aunque muchos dudan de esto, pues en diez años no les ha importado esta obra. Y así como traicionaron a Japón al no proceder con el plan de desarrollo que acompañaría la construcción del puerto, ahora se ven dispuestos a entregárselo a China Continental, indistintamente de las repercusiones políticas y militares que tal cosa acarree.

Obviamente una cosa es lo que los chinos continentales prometan y otra lo que cumplan, pues por ahora no hay marcha atrás. Pero la ruptura de relaciones trae consecuencias, una de ellas la suspensión de los proyectos de colaboración en muchos campos que China Nacionalista, como también se le conoce, ha venido desarrollando; otra, los efectos que eso tendrá en nuestras relaciones con Estados Unidos, que desde ya advierte de implicaciones negativas respecto a muchos programas en curso, como lo ha advertido la embajadora Manes.

Los salvadoreños no tienen nada contra los chinos continentales —que tienen un sistema económico capitalista, pero un férreo gobierno comunista— pero es de esperarse que al asumir un gobierno decente los destinos del país, esa ruptura se rectifique, pues la forma en la que han procedido es oscura y solo genera dudas y repudio.

Las relaciones de El Salvador con la República de China datan de 1933. En 1949, las tropas de Chiang Kai Shek, traicionadas por sus previos aliados, salieron del continente y establecieron el gobierno en Taiwán (Formosa, o la isla Hermosa de los portugueses), manteniendo el reconocimiento de la comunidad internacional, incluso de El Salvador. Y a Dios gracias, los nacionalistas de Chiang Kai Shek llevaron consigo los tesoros artísticos de China, que ahora pueden verse en uno de los museos más hermosos del mundo, fulgurantemente hermosos, que les coloca a la par de los museos emblemáticos, incluyendo el Louvre, El Prado, las Uffizzi y los Museos Vaticanos.

La buena gente en esta

tierra no da golpes

por la espalda

De China Continental no se puede esperar la calidad y extensión de la asistencia que recibía el país de la República de China en Taiwán, en primer lugar por el conocimiento del país que adquirieron en los ochenta y cinco años de relaciones, los contactos con muchos sectores en todos los campos, desde el agrícola al cultural, de las amistades que sus diplomáticos han cultivado con salvadoreños en todos los niveles, del cariño por nuestro país que han demostrado siempre.

A los efemelenistas no les importan los aportes sociales y culturales, sino que van detrás de sus intereses políticos y financieros, los mismos por los que han empobrecido a los salvadoreños en estos nueve años.

Como dijo San Josemaría Escrivá de Balaguer, construir una catedral toma siglos, pero destruirla puede tomarle semanas a un picapedrero. Y lo que fue hasta ayer, Dios mediante vuelva a ser un vínculo afectivo y sensato.

La buena gente en este suelo, la mayoría de salvadoreños, no da puñaladas por la espalda, no finge amistades, no olvida a sus amigos y no le mueve bajos intereses.

Sepan nuestros leales amigos en el mundo que los buenos salvadoreños estamos avergonzados por lo sucedido.