La humanidad entera depende de la tecnología que contribuye al progreso y la enseñanza

En estos tiempos es suficiente dar a un joven o niño una tableta y ocuparse de que esta tenga los programas adecuados para su edad, para que él vaya descubriendo cómo funciona.

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Por Mirna Navarrete

18 September 2017

El evento Apple puso de manifiesto para cientos de millones de personas en el mundo, el decisivo papel que la tecnología tiene en la vida de todos los seres sobre la tierra, aun en la de pueblos muy primitivos gracias a las comunicaciones.

Como usuarios de tecnología, cada día que pasa damos nuestro voto a favor de muchos avances, como al no utilizar equipos, programas o tendencias, contribuimos a que se descarten.

Existe en las sociedades libres un derecho a tener éxito, como también un derecho de la especie humana al fracaso de lo que no conduce a ninguna parte.

A las obras de los hombres se aplica principio fundamental de la vida, la sobrevivencia de los mejores, “the survival of the fitest”; en su momento los dinosaurios eran la especie mejor preparada para habitar y dominar en la tierra, pero cambios geológicos y climáticos los hicieron desaparecer.

Y desaparecieron no porque las fábricas y actividades de los dinosaurios forzaran el cambio climático como creen los ingenuos miembros de esa religión del “cambio climático”, sino porque el Astro Rey, el sol, Apolo, así lo dispuso.

Los avances expuestos en el evento Apple, como en su oportunidad los de Microsoft o Samsung, obligan a millones de nosotros a adaptarnos a ellos, aprender el uso de nuevos programas y aparatos para sacarles pleno provecho. Debemos siempre “actualizarnos”.

En esto los jóvenes son muy diestros y despiertos, al tener acceso a computadoras, teléfonos inteligentes, tabletas, aparatos de sonido o instrumentos musicales. Es esencial educar en la mejor manera posible, a nuestros niños y jóvenes.

El sistema escolar debe hacer énfasis en las disciplinas básicas, en la lectura, en aprender a seguir instrucciones, a desarrollar conocimientos de matemáticas, saber redactar.

En los países prósperos, (sociedades capitalistas) las escuelas disponen de equipos, profesores y laboratorios donde puedan los educandos aprender lo nuevo.

En un país muy empobrecido como el nuestro, lo usual de naciones que caen en el “socialismo”, hay que priorizar la enseñanza de jóvenes con aptitudes especiales que luego con el ejemplo de lo que hacen incentiven a otros jóvenes a copiarlos, a seguir sus pasos.

Pues nada se aprende con mayor rapidez que lo interesante y novedoso. En estos tiempos es suficiente dar a un joven o niño una tableta y ocuparse de que esta tenga los programas adecuados para su edad, para que él vaya descubriendo cómo funciona.

Los excelentes periódicos de El Salvador son la mejor y la única lectura del pueblo

¿Cuál es la opción cultural para los niños que no tienen acceso a computadoras y sistemas similares?

La opción es la lectura, el medio excelente que desde hace cinco mil años informa, enseña, orienta, agudiza la inteligencia, abre ventanas a la imaginación como ningún otro recurso al alcance del hombre.

Sócrates se educó leyendo, como Alejandro Magno, César, Cicerón, al igual que San Agustín y los padres de la iglesia, Santo Tomás de Aquino, San Francisco de Asis, Dante, Voltaire, Bolívar, nuestros próceres.

Los jóvenes y adultos de nuestro país tienen a su alcance sus excelentes periódicos, los que les informan, les divierten, les traen noticias para aprovechar sus recursos, los defienden y son la mejor tribuna del pueblo.

Las personas que se educan leyendo son las mejor preparadas, las que mejor piensan, las que son mejores miembros de una comunidad y del mundo.