La magia de la tecnología actual en lo que directamente puede enriquecer nuestras vidas brilló el martes en la presentación de Apple de los nuevos modelos del iWatch, el AppleTV y tres distintas versiones del iPhone, incluyendo la más avanzada, que lo activa reconociendo el rostro de su dueño.
Las presentaciones abundaron en superlativos: asombroso, increíble, un adelanto gigantesco, lo nunca visto, supera la realidad, lo más avanzado... Y efectivamente lo es, como el hecho de poder llevar en un reloj de muñeca cuarenta millones de canciones o piezas musicales, o que este monitoree y participe en los hábitos de cada usuario para tutelar su salud.
La exposición se realizó en el auditorio Steve Jobs, parte de un complejo arquitectónico muy hermoso que se integra a los jardines y arboledas que lo rodean. El centro opera con energía renovable gracias a sus placas solares. Una enorme pantalla de fondo permitía proyectar gigantescas imágenes en colores acentuados...
El nuevo modelo del Apple TV proyecta imágenes sobre una pantalla de televisión al doble de la más avanzada resolución del momento, casi haciendo realidad --o “mejor” que la realidad-- filmes, videos, transmisiones en vivo como ceremonias públicas, noticieros, encuentros deportivos. Los aficionados pueden quedarse en casa y ver mejor un juego de fútbol que los espectadores en el estadio...
Cuidan de nuestra salud, nos alertan integrándonos a lo mejor de la humanidad
El iWatch y los nuevos modelos del iPhone fueron las estrellas de la gala.
El iWatch, lo dijeron con mucho orgullo, pasó de ser el segundo reloj más vendido en el mundo a ser el primero, sobrepasando la producción masiva suiza con el Swatch y japonesa con sus diversas y excelentes marcas.
El iWatch monitorea la salud del usuario gracias a las aplicaciones que se instalen, lo que incluye avisos sonoros para alertar de una crisis cardiaca.
El reloj sigue con precisión las actividades de su dueño: “debes ponerte de pie”, “camina”, “has quemado tantas calorías” y así sucesivamente.
La nueva serie de iWatch, modelo 3, es impermeable y uno de ellos funciona como teléfono independiente, aparentemente copiando en un chip especial el del teléfono base. Eso convierte en realidad el radio de muñeca de un personaje de caricaturas de hace muchos años: Dick Tracy.
El reloj es como una lancha de alta velocidad del buque insignia, el iPhone.
Los iPhone llenan múltiples funciones además de la básica de telefonía, funciones que se apoyan en las dos cámaras de alta resolución con que cuenta y los programas incorporados para manejar imágenes, mejorar color y contraste, sobreponerlas a otras imágenes, unirlas, así como filmar videos de calidad excelente, única en aparatos de mano.
El modelo 10 del iPhone se activa con el rostro del usuario, el que reconoce lanzando un haz de decenas de miles de rayos infrarrojos que funciona en la oscuridad. Se informó que la huella digital de los anteriores modelos tiene una seguridad de uno en cincuenta mil; el reconocimiento facial tiene una precisión de uno en un millón, aun cuando se trate de dos gemelos idénticos.
El mundo mágico presentado por Apple es parte de lo que la ciencia y la tecnología de países libres desarrollan para enriquecer nuestras vidas, protegernos, entretenernos e integrarnos al resto de pueblos avanzados, a su cultura y sus alegrías.