Nuevo gobierno debe reconsiderar ruptura con China Taiwán

Volver con la República de China en Taiwán nos reportaría muchos beneficios, como lo han señalado varios sectores, entre ellos los azucareros. Además El Salvador obtuvo mucho de bueno con los programas de formación y promoción humana, así como de renovación agrícola, los que se pondrían nuevamente en marcha.

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13 March 2019

El embrollo causado por la turbia ruptura del gobierno efemelenista con la República de China en Taiwán y la apresurada apertura de relaciones con China Continental debe ser motivo de análisis a fondo y replanteamiento para el próximo gobierno.

Se traicionó a un gobierno democrático con el que mantuvimos lazos durante decenios, para ir a mendigar dinero a un régimen que se ha denunciado que pretende usar nuestro territorio para establecer una base militar en una zona que Estados Unidos ve como clave para su seguridad en el Hemisferio.

El presidente electo Bukele dijo que iba a definir la relación con China Continental, pero las implicaciones, riesgos y potenciales pérdidas para El Salvador son tan significativos, que lo propio es formar un grupo consultor que mida consecuencias para no estrellarnos como nación y entrar en conflicto con Estados Unidos, que no está dispuesto a abandonar a Taiwán.

El influyente senador Marco Rubio, que preside el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta del Congreso estadounidense, celebró ayer el anuncio del próximo gobierno de revisar la apertura de relaciones con China Continental. “Estoy complacido que el presidente electo Bukele ha dicho que revisará las relaciones con China para hacer cambios necesarios de la política de la administración anterior, al mismo tiempo espero que Estados Unidos seguirá más comprometido con nuestros socios que han sido presionados por China, para asegurarnos que no serán vulnerables a este tipo de tácticas agresivas del gobierno chino”.

“El año pasado, estuvimos profundamente decepcionados que la actual administración salvadoreña haya roto sus relaciones con Taiwán, otra democracia, y en su lugar haya abrazado a la China Comunista, muchos de nosotros creemos que fue un gran error que probará ser muy costoso y de vista corta, dada la diplomacia china de la “trampa mortal” y la explotación económica global”, declaró el senador.

Con los últimos movimientos entre China y Rusia, que están forjando una especie de eje con tentáculos en gran parte del mundo y apoyando dictaduras como la de Venezuela, no puede El Salvador lanzarse a la piscina sin saber si tiene o no tiene agua, sin medir después de mucho análisis, las consecuencias.

Muchos consideran a Rusia y China como dos dictaduras casi absolutas, que pretenden estructurar un “imperio del mal”, una fuerza de alcance global que amenace y pueda forzar la mano de las naciones occidentales, de la civilización como la conocemos.

“China ha continuado sus esfuerzos para expandir su influencia y su presencia en el hemisferio occidental, espero que sigamos denunciando la influencia de China y del Partido Comunista en El Salvador”, dijo Rubio.

Y tanto en China como en Rusia, tras un breve respiro de libertad, la población está siendo más y más sometida a controles y amenazas, la última decretando cárcel para aquellos que critiquen al régimen ruso, lo que es una vuelta al estalinismo y que se suma a las crecientes restricciones para formar partidos políticos y competir en elecciones.

Al grupo de fuerza ya se unió la India y no tardan en agregarse países como Filipinas, que pese a tener gobiernos electos democráticamente, quieren protegerse de potenciales agresiones de China, que apoya a Corea del Norte por ser esta monstruosa dictadura la que desarrolla sus artefactos atómicos.

El Salvador le debe mucho a China Taiwán

Volver con la República de China en Taiwán nos reportaría muchos beneficios, como lo han señalado varios sectores, entre ellos los azucareros. Además El Salvador obtuvo mucho de bueno con los programas de formación y promoción humana, así como de renovación agrícola, los que se pondrían nuevamente en marcha.

La solidaridad de China Taiwán con El Salvador se demostró en múltiples ocasiones, una de ellas durante la guerra en los Años Ochenta: prácticamente todos los países retiraron a sus representantes diplomáticos para ponerlos a salvo de atentados como los que sufrieron el entonces embajador de Sudáfrica y dos industriales japoneses, entre otros; empero, el embajador de China nacionalista, Andrew J.P. Shen, se quedó con nosotros esos años de la mortandad y destrucción.

Nuestro país sólo logrará superar las desgracias que sufre a consecuencia de la corrupción y de las torpezas perpetradas por fanáticos, cuidando cada paso en su andar, no desbocándose.