Uno de los graves problemas, además de otros gravísimos que afectan a muchos hogares y familias salvadoreñas, es el problema de la drogadicción y/o alcoholismo. Este azote lo sufren generalmente los padres con los hijos, o bien, las esposas con los esposos y muchas veces viceversa.
Ante situaciones como ésta, que puede estar padeciéndolas cualquier hogar, con el agravante de estar haciendo víctimas por consecución al resto de integrantes de la familia, siempre El Salvador se ha distinguido por tener miles de ciudadanos humanitarios, prestos a dar su mano generosa para levantar al que ha caído en esta hecatombe de drogadicción... y alcohol.
Estos salvadoreños bienhechores que pululan salvando vidas –que están en peligro de perderse si no reciben la ayuda pertinente–, sin esperar nada a cambio, forman agrupaciones y sociedades de ayuda. De allí nuestras grandes fundaciones que dejan huella.
Una de éstas es la Fundación Carisma y su rama de “Hogares Crea”. Esta fundación nace en 1988 por el empuje de la Renovación Carismática de la Parroquia Corazón de María y con el apoyo inicial de los Padres Claretianos, especialmente del párroco entonces, Padre Francisco Fierro, decidiendo construir una clínica asistencial para pacientes de escasos recursos, donde se les atiende en las ramas de medicina general, ginecología, pediatría, odontología, laboratorio clínico, sicología y ayuda espiritual. Últimamente sus servicios se extendieron a una clínica láser, para remover tatuajes, arrugas, manchas, hongos etc. Esta última fue adquirida con donativos de la feligresía y de su actual párroco, Padre José Centre.
Pero la Fundación Carisma se destacó aún más cuando decide ayudar a la reeducación de la juventud emproblemada por los vicios del alcohol y drogadicción. Para esto fundan los “Hogares Crea”, que atienden a personas de uno y otro sexos, desde 18 años en adelante sin importar credo, sexo o condición económica. Su programa tiene un altísimo índice de efectividad hasta del 80 %, uno de los mejores del mundo entero. Los “Hogares Crea” forman una de las mejores comunidades terapéuticas de El Salvador, contribuyendo así a disminuir indudablemente este trágico destructivo binomio de drogas/violencia que nos afecta a todos.
El primer “Hogar Crea” fue construido en terreno donado por la familia Calles en Los Planes de Renderos. Pero ahora los hogares y sus excelentes programas salvando de las garras de las drogas y alcohol a la juventud se han extendido hasta Sonsonate (en Santísima Trinidad), donde la notable humanitaria familia Simán edificó el local del Hogar, en terrenos dados en comodato para 99 años, por el alcalde Roberto Aquino. Este fue equipado con donativos de la Fundación Gloria de Kriete. Poco tiempo después el Ing. José Ventura donó un terreno de media manzana en San Miguel, que solo espera reunir los fondos necesarios para construir este centro en el oriente del país y ayudar a los jóvenes emproblemados en dicha zona oriental.
Una de las formas de recaudar fondos de ayuda para el avance de los Hogares Crea y la Clínica de la Fundación Carisma ha sido debido al aporte de erarios de la Conferencia Episcopal de Italia, que consiguiera el Nuncio Apostólico de hace algunos años, monseñor Luigi Pezzutto, con los que se construyó y equipó una panadería.
Pero existen mil necesidades más por lo que Hogares Crea, cada año, organiza una fiesta bailable para recaudar fondos y oxigenar el motor que hace avanzar sus más urgentes y fuertes necesidades.
Salvadoreño, los jóvenes en estos programas de reeducación necesitan tu mano para superar la droga. Por $50°°, asistes a la cena bailable de los “Hogares Crea”, este miércoles 5 de septiembre en Hotel Sheraton Presidente. Y así, ayudando, disfrutarás de deliciosa cena y la espectacular música de Carlos Anaya.
Graduada del Conservatorio de Montreal (Rama Ópera-Lírica).
Licenciatura en Desarrollo Infantil y Relaciones Humanas.
Escritora de Libros: “Al Filo de mi Pluma” y “Mi boda”.