Ser madre es saber amar

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Por Julia Regina de Cardenal

04 May 2018

Las niñas actualmente están creciendo en un mundo materialista, egoísta y hedonista muy confuso, que por un lado les dice que solo pueden realizarse compitiendo con los hombres en el área laboral, pero por otro tienen el deseo de formar una familia y cuidar a sus hijos. Hay mucha presión en contra de la maternidad, sin embargo, no han podido lograr el rechazo ni siquiera en países que se autodefinen como “progresistas” o de “avanzada”. La naturaleza es más fuerte.

¿Qué implica ser madre? Amar, educar, formar a los hijos para que sean personas de bien en la sociedad. ¿Cómo lograrlo? ¿Cómo no equivocarse? Si bien la maternidad implica una gran responsabilidad y muchas veces ha sido atacada por considerarse un “sacrificio demasiado pesado para las mujeres”, la verdad es que las satisfacciones son mucho más grandes que cualquier sacrificio y más cuando se hace por amor.

Se han hecho muchos estudios socioculturales alrededor del mundo sobre lo que los hijos necesitan para tener un desarrollo óptimo y mejores oportunidades. Los resultados que muestran las estadísticas son muy útiles para saber cuál debería de ser el camino por seguir.

Uno de los descubrimientos ha sido la relación de las estructuras de organización familiar, con el rendimiento de los hijos en la escuela, el uso o abuso de drogas u otros vicios, el involucramiento en actos delincuenciales, la actividad sexual a edades tempranas, entre otros problemas que vemos tan frecuente en la actualidad.

Ser madre es querer lo mejor para los hijos y estos estudios son herramientas muy útiles para lograrlo. Por ejemplo, la familia bien constituida por un padre y una madre comprometidos libremente en matrimonio es la que puede darles mayor seguridad y estabilidad social, moral y económica a los hijos. La madre se apoya en el padre y viceversa. Se complementan y los hijos se nutren de la feminidad de la madre y la masculinidad del padre quienes comparten todas las responsabilidades y educación de sus hijos. ¿No debería de ser ese tipo de familia la que se debería de buscar?

Por otro lado, las madres solteras que tan valientemente luchan por sacar adelante a sus hijos, no tienen el apoyo del papá de estos y desafortunadamente tienen muchas mas dificultades con educar y darle tiempo a sus hijos.

Asimismo, hay otras madres que tienen pruebas grandes al estar en relaciones de segundas nupcias o segundas uniones y con hijos de dos o más padres. Los problemas se incrementan en estas situaciones. Y a todos les toca luchar más contra las adversidades que se van presentando día a día.

Todas las madres, en cualquier tipo de estructura familiar buscan para sus hijos mejores oportunidades, por lo tanto deben fomentarles ideales altos tal como buscar el matrimonio para tener mejores vidas. Aunque no haya podido darles la mejor estructura familiar, la madre sabe que sus hijos, además de amor, necesitan orden y disciplina; por tanto, tiene la obligación y el derecho de exigirles explicándoles la razón y la importancia de buscar la excelencia en todo especialmente en el área de la afectividad, sexualidad, noviazgo y matrimonio para evitar que cometan errores que pueden involucrar a inocentes.

Se debe reconocer las virtudes, dedicación, paciencia, entrega, sacrificios heroicos de las madres salvadoreñas luchadoras que ante todas las adversidades transmiten valores morales y principios especialmente el respeto al derecho a la Vida. ¡Felicidades a todas las madres!

Columnista de El Diario de Hoy.

Master en Desarrollo Humano

Master en Asesoramiento Familiar