La calidad de la democracia salvadoreña

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Por Elizabeth Castro

14 April 2018

Recientemente se llevó a cabo en San Salvador la VI edición del Foro Internacional de Análisis Político (FIAP), organizado por Fusades, y de entre los destacados politólogos y analistas internacionales que participaron en él, me agradó mucho, ya no solo haber leído, sino escuchar de viva voz los análisis del profesor Manuel Alcántara de la Universidad de Salamanca, sobre el tema de la confianza política, la desafección política y la calidad de la democracia en América Latina.

Para analizar el tema de la calidad de la democracia en América Latina el profesor Alcántara ha escrito y asimismo expuso en el foro mencionado, los índices de Freedom House, el Índice de Desarrollo Democrático (IDD) de Politat, el Índice de Democracia EIU (Economist Intelligence Unit) y el Índice de Transformación de la Fundación Bertelsmann (BTI); para luego integrar los cuatro índices en un formato que usa la técnica de HJ-Biplot, lo que posibilita distinguir la presencia de cuatro distintas familias de países latinoamericanos, con características parecidas, en relación con su diferente grado de calidad de democracia que practican.

Distingue a Chile, Uruguay y Costa Rica como pertenecientes a la familia de países con el grado de calidad de la democracia más alto; Panamá y Brasil se agrupan en la familia con un índice alto, solamente; El Salvador se encuentra en el grupo de índice medio y lo acompañan Argentina, Colombia, México, Paraguay, Perú y República Dominicana. Con el índice más bajo fueron señalados Bolivia, Ecuador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Venezuela.

De los índices analizados, el que atrapa mi atención a pesar que sus indicadores se originan de percepciones subjetivas, aunque también de rendimientos empíricamente cuantificables, es el Índice de Desarrollo Democrático (IDD) de Politat, pues aparte de otros indicadores, toma en cuenta la eficiencia política y el ejercicio de poder efectivo para gobernar, separando esta última en la capacidad para generar políticas que aseguren bienestar y eficiencia económica.

Atrapa mi atención dado que observo los efectos de la crisis económica en que se encuentra nuestro país, la cultura de migración externa imperante, la suciedad y desorden de nuestras calles y avenidas, el hacinamiento, el deterioro masivo de la infraestructura nacional y particular, la tendencia al ilícito, y ya no se diga la criminalidad; concluyendo que la eficiencia política y económica, el poder efectivo para gobernar y la generación de políticas que aseguren bienestar a los salvadoreños, son atributos, aparte de indicadores, que les ha faltado en mucho a nuestros gobernantes, y que tenemos suerte que El Salvador haya caído dentro de la familia de países con un índice medio de democracia.

Dicha falta de atributos en nuestros gobernantes ha llevado a la desafección que menciona el profesor Alcántara, es decir, a la condición principalmente emocional y pasional de ausencia de sensación de pertenencia al grupo social, el sentirse a disgusto con la comunidad política, la falta de confianza en ellos, y la carencia de líderes, entre otros.

Además conlleva la sensación de falta de poder e incluso anarquía y también de escasa eficacia política. Todas sensaciones que manifiestan presentar la mayoría de salvadoreños.

Y esta desafección se acompaña de la falta de confianza, que en Sociología y Psicología Social se describe como la creencia de que una persona o grupo no será capaz y no deseará actuar de manera adecuada en una determinada situación y pensamientos. Siendo que precisamente los salvadoreños ya no creemos que nuestros actuales gobernantes sean capaces ni deseen actuar de tal manera que todos los salvadoreños alcancemos el estado de bienestar anhelado.

Todas estas percepciones y los rendimientos cuantificables me hacen colegir que la técnica HJ-Biplot conlleva un porcentaje de error gracias al cual El Salvador cayó en el grupo de países con un grado de calidad de democracia medio, pero que en realidad pertenece al bajo.

Médico, Nutrióloga y Abogada

mirellawollants2014@gmail.com