"A través del espejo” es una novela del escritor inglés Lewis Carrol, quien después del regreso de Alicia del País de las Maravillas, la presenta intrigada porque el espejo sobre la chimenea de la sala, refleja un mundo exactamente igual, pero cuyos muebles, adornos, cuadros y alfombras están exactamente al revés, y decide meterse por el espejo para averiguar.
Los salvadoreños estamos reviviendo esta historia, entre el mundo real y angustioso en que vivimos y otro ideal, totalmente al revés, de los funcionarios del gobierno del buen vivir, en el que buscan desesperadamente mantenerse, y para lograrlo están tomando acciones, y emitiendo leyes y decretos, algunos inconstitucionales.
En el mundo real vemos en el Hospital Rosales: un rótulo escrito con pésima caligrafía y peor ortografía, avisando que se HAGOTÓ (sic) cierto medicamento. Un memorándum ordenando a los médicos suspender las cirugías, por no haber analgésico post operatorio y entregar a los pacientes la receta para comprarlo fuera. Gravísimo, porque las farmacias no pueden vender morfina a particulares.
Destruidas y ruinosas escuelas sin presupuesto para operar, ni sueldos para los maestros, y un recorte de $4 millones a su endeble presupuesto para tapar agujeros del desfinanciado presupuesto. Que luego Cáceres repone, sacándolos del impuesto a la telefonía, que por ley, debe ser destinado únicamente para seguridad.
Los pequeños empresarios contratados para proveer zapatos, uniformes y paquetes escolares, endeudados para comprar maquinaria y más personal para cumplir con los exigentes plazos establecidos, siguen esperando su pago, aunque ya les están demandando el producto para el siguiente año. El gobierno siempre paga tarde, pero paga, es la ingrata justificación.
Hay temor sobre la transparencia de las próximas elecciones, ante el drástico recorte de $14 millones del presupuesto del TSE, recordando el desastre de los comicios anteriores, en que las autoridades electorales demostraron absoluta incompetencia, al contratar miniempresas, recién creadas, y sin experiencia, que resultó en un proceso lento, poco confiable y totalmente reñido con la tecnología usada en elecciones anteriores. En el mundo del espejo, el magistrado considera morbo exigir resultados inmediatos.
Pero en mundo del espejo, en el que vive el FMLN, solo faltan cuatro medicamentos en el hospital, por atraso de una megacompra que entrará en junio, porque no se permitió la compra directa, las licitaciones tardan y ARENA no autorizó el préstamo. Para Lorenzana la economía ha estado creciendo en forma constante, aunque ocupemos el último lugar en la región.
El vicepresidente Ortiz, el ministro Merino y el embajador Sigfrido aplauden sus logros en cuanto a atracción de inversiones. El Aeropuerto de Comalapa es el segundo mejor de la región, después del de Panamá; presentan cifras enormes de inversión extranjera, sin considerar los millones de salida de capitales. Y aunque los datos del ISSS reflejan 33,000 empleos perdidos, en el espejo del Goes solo fueron 13,000.
El presidente Sánchez Cerén no perdona a los medios de comunicación por reflejar la realidad, acusándolos de engañar a la población por denunciar los aumentos en los homicidios y el fracaso total de las medidas extraordinarias de seguridad, muchas cercanas al delito. Han injuriado a los magistrados de la Sala de lo Constitucional, incitando a la población a desobedecer sus sentencias, por su celo en defender la Carta Magna.
El informe anual del mandatario ante la Asamblea y luego sus rabiosa diatriba ante la militancia del Frente, son una demostración evidente de que ellos viven en el mundo de Alicia, a través del espejo, mientras los ciudadanos experimentamos el mundo de la realidad. Comparemos ambos mundos, para recordarlo en las próximas elecciones.
* Columnista de El Diario de Hoy.