“Un sistema electoral eficiente está llamado a facilitar el ejercicio de sufragio al elector”. Ese es el llamado que la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades) hace al Estado salvadoreño de cara a las presidenciales de febrero y marzo (para una posible segunda vuelta) de 2019.
Esto a raíz de que el pasado 5 de octubre, el presidente de la República Salvador Sánchez Cerén vetó un decreto que autorizaba a salvadoreños a votar con el Documento Único de Identidad (DUI) vencido.
Según datos del Registro Nacional de las Personas Naturales (RNPN), hasta el 21 de mayo había más de 1.6 millones de personas con el documento próximo a expirar y que quedarían inhabilitadas de ejercer el voto el próximo año.
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Por ello, Fusades hizo un llamado a la Asamblea Legislativa a superar el veto presidencial “y permitan que, una vez electa la Sala de lo Constitucional, se ratifique la atribución legislativa de prorrogar la vigencia del DUI para que los votantes designen a través del sufragio a quienes dirigirán el país durante los próximos cinco años”.
Al Ejecutivo, le piden agilizar la aprobación de medidas que permitan la renovación del DUI a los electores. Además, señalan que desde que no hay Sala de lo Constitucional, el presidente ha emitido un número inusitado de vetos por inconstitucionalidad en relación al resto de su mandato, “lo que ha creado suspicacias sobre si esto se debe al aprovechamiento de la falta de Sala (Constitucional)”.
Además, llaman al Estado en general “a generar las condiciones para que un mayor número de personas voten en la siguiente elección”. Por ejemplo, el tanque de pensamiento pide al TSEla promoción de una campaña para que se renueve el DUI y se pueda proceder a votar. Estos mensajes, añaden, “deben dirigirse a los jóvenes que cumplan 18 años antes del evento electoral”.