La Cooperación Española ha financiado diversos proyectos relacionados al reconocimiento de los pueblos indígenas. No han faltado organizaciones interesadas en administrar el dinero; a pesar de que la Ley de Cultura faculta al Ministerio de Cultura como el ente rector de la actividad relacionada con el tema cultural de los pueblos indígenas.
El Ministerio de Relaciones Exteriores gestiona los fondos de la cooperación internacional. Para poder ejecutar proyectos relacionados con los pueblos indígenas se creó una “Mesa Interinstitucional” compuesta por un representante de cada entidad: el Gobierno; el Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer (ISDEMU); la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH); el Instituto de Transformación Agraria (ISTA); Cancillería y el Ministerio de Cultura. Estos actores deben decidir, en consenso, la gestión de los fondos donados. ¿Se cumple ese consenso?
El 29 de mayo de este año, Cancillería entregó al ISTA un proyecto por 76 mil dólares llamado: “Socialización, Sensibilización e Incidencia Política para la Implementación del Plan Nacional de Pueblos Indígenas con Enfoque de Derechos de Mujeres Indígenas”. El Ministerio de Cultura supo de este proyecto hasta que ya había sido asignado a dicha institución. Cuando a la ministra de Cultura, Silvia Elena Regalado, se le preguntó si un representante de su ministerio había acordado con la Mesa Interinstitucional que los fondos los administrara una institución reconocida por entregar tierras y no por hacer proyectos culturales, respondió: “No sé. Tengo entendido que no, pero voy a consultar”.
El Diario de Hoy tuvo acceso a un documento que contiene los detalles del proyecto; uno de los objetivos dice “impulsar la cultura como derecho…”. Pero, ¿por qué el ISTA administra el proyecto si el artículo 35 de la Ley de Cultura dice que la gestión cultural en El Salvador debe hacerla una institución que vele por la cultura? Esa institución es el Ministerio de Cultura. Si ellos no estuvieron presentes en la decisión sobre la ejecución de este proyecto, ¿bajo qué argumentos la Mesa Interinstitucional se lo adjudicó al ISTA?
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El ISTA administra tierras del Estado y las reparte a algunos campesinos beneficiarios de la Reforma Agraria. El proyecto dice que el ISTA es “la entidad idónea por contar con las capacidades técnicas y administrativas para ello”. Pero el ISTA solo trabaja con población campesina, alguna de la cual es indígena. En cambio, el Ministerio de Cultura tiene su propio departamento dedicado a la gestión cultural de estos pueblos. En este proyecto también participa CCNIS. Amadeo Martínez dijo que ese proyecto le fue asignado al ISTA “porque acompañó el proceso del Plan Nacional de Pueblos Indígenas. Yo creo que como había conflicto entre la Política (elaborada por el Ministerio de Cultura) y el Plan (elaborado por CCNIS y otras organizaciones incluida el ISTA) Cancillería se identificó más con el Plan. Esto ha sido para garantizar ese proyecto directamente dentro de los ejes del Plan”.
En tres ocasiones se buscó entrevistar a un vocero de Cancillería para hablar sobre este tema. El equipo de prensa dijo que necesitaban saber con detalle las preguntas sobre el tema. Se les dieron dos preguntas puntuales: ¿Hubo un representante del Ministerio de Cultura cuando decidieron que el ISTA lo administraría? ¿Cuáles fueron las razones por las que el ISTA va a responsabilizarse de este proyecto cultural no siendo esa su competencia? La respuesta de prensa fue que a la Mesa Interinstitucional asiste un técnico que no tiene vocería en el tema. Cancillería calla.
El ISTA no tiene rectoría cultural. Ellos han entregado tierras a los campesinos por años. Líderes indígenas como Margot Pérez han reaccionado ante esta situación. Ella exhortó a los ministerios involucrados a que “respeten” la entidad encargada del área cultural de los pueblos indígenas. “Pedimos a Cancillería que no vaya a favor solo de un grupo. El ISTA tiene 76 mil dólares que han invertido por el Plan PIES. Si hacemos una investigación de cuánto dinero tenía el Ministerio de Cultura para hacer la Política Nacional, ni para el pasaje”.
El 7 de agosto se concretó una entrevista con la jefa de la Unidad de Género del ISTA Carmen Medina. Al llegar a las instalaciones, el 8 de agosto, no estaba. El ISTA también calló.
La rectoría de los pueblos indígenas parece estar en constante disputa. Esas rivalidades dejan a un lado las verdaderas peticiones de los líderes indígenas, quienes llevan años tocando puertas y enviando cartas, para que de una vez por todas se les escuche.