Luego de dos semanas desde que se desató el escándalo por el caso “Saqueo Público” en el que la Fiscalía acusó a 31 personas, incluyendo a Mauricio Funes, de haber participado en el desvío de 351 millones de dólares del Estado a cuentas personales, aun no se han decretado órdenes de detención para al menos 22 de los implicados.
El que lleva el caso es el Juzgado Quinto de Paz de San Salvador, y de acuerdo a abogados consultados, el juez no tiene plazo definido para resolver si emitirá las órdenes de captura contra Mauricio Funes y otros de los implicados, toda vez que no se ha realizado audiencia.
“Podría haber nulidad o se puede caer un proceso si no se cumple con los plazos porque con eso se violentan garantías y derechos constitucionales, pero en este caso no se le está vulnerando ningún derecho (a Funes) porque aunque ya sabe (que están en medio de una investigación) no se ha hecho presente, no ha sido intimado-notificado de los delitos que le acusan”, dijo un abogado que solicitó el anonimato.
Lo que el juez debe es fundamentar en un escrito las razones por las que no ha resuelto todavía luego de casi dos semanas desde que seis implicados, entre ellos el amigo de Funes, Miguel Menéndez (Mecafé) fueron capturados. “Es bien común que los jueces no cumplan los tiempos para resolver, eso pasa a diario, pero en este caso está puesta la atención por la conmoción social que ha generado; porque ha sido mediático. Todo mundo está pendiente y esperando saber que decidirá el juez”, agregó el abogado.
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Una fuente fiscal consultada sobre si algún tecnicismo podría favorecer a Funes y al resto de imputados, afirmó que el juez está obligado a citarlos y notificarles en la audiencia, pero la Fiscalía no está obligada a citarlos.
“En caso de que hubo audiencia y no se notificó, se puede beneficiar a los investigados, pero no es este el caso”, dijo la fuente fiscal.
Por el caso Saqueo Público seis personas fueron detenidas la semana pasada y otros tres ya están presos en Mariona, por su relación en el caso también de saqueo de las finanzas del Estados por el expresidente Antonio Saca.
De acuerdo con las investigaciones fiscales, Funes lavó $10.2 millones directamente y habría implicado en el desvío de millones de dólares a su círculo más íntimo de amigos , funcionarios y sus familiares, incluidas tres exparejas y la actual. El Gobierno de Sánchez Cerén se ha desligado del ahora asilado.
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