A petición del diputado de ARENA, David Reyes, la Comisión de Obras Públicas tuvo a bien convocar ayer, para el 18 de diciembre, a representantes de la empresa Uber que prestan servicio de traslado de personas con vehículos particulares, a trabajadores que usan dicha plataforma como una opción de empleo, y a las asociaciones de taxistas para que expongan sus inquietudes y posiciones con respecto al servicio y su legalización en el país.
También han solicitado informes al Viceministerio de Transporte (VMT), a la Defensoría del Consumidor y a los directivos de Uber para abonar al proceso de incorporación de la plataforma digital de Uber como servicio de taxi en El Salvador.
Lo anterior deviene tras protestas de los taxistas convencionales de que Uber es una “competencia desleal”, porque no están registrados en el VMT.
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También, el titular de dicha entidad, Nelson García, advirtió en días pasados en una entrevista radial, que no circularan debido a que no están regulados en la Ley de Tránsito y Transporte Terrestre.
Hace un par de semanas, García les informó a los dueños de los vehículos que trabajan con Uber, que serían multados y sus carros decomisados si la Policía los encontraba en flagrancia, es decir, viajando con pasajeros.
Ante esto, Reyes introdujo en la Asamblea una petición de reforma a la normativa de tránsito para que la empresa Uber sea regulada al igual que los taxistas convencionales.
De acuerdo al diputado tricolor, hay que buscar un sistema que permita a quienes laboran con este mecanismo que tiene a la base una plataforma digital, seguir trabajando con Uber, ya que es una fuente de empleo, debido a que en el país las fuentes de trabajo son escasas.
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Para lo anterior, Reyes propuso en la Asamblea en días pasados una reforma a los artículos 28 y 29 de la Ley de Transporte Terrestre, para crear una nueva categoría de transporte, que se llamaría: “Servicio Privado de Transporte Colaborativo”.
Con esto, según Reyes, las empresas como Uber podrían trabajar sin el riesgo de violar el marco legal del país. Sin esa reforma, ayer admitió que por el momento, Uber sí estaría operando fuera de la ley.
“Ahora es exclusivo para los taxistas. Con esto se amplía y se da lugar a plataformas tecnológicas como Uber para que puedan operar sin ningún inconveniente”, sostuvo.
Recordó que la competencia es saludable, para que la población usuaria pueda tener opciones de un mejor servicio de taxis, pero con regulación y que bajo esa perspectiva es que los diputados tienen pensado trabajar en legalizarlos.