Fabio Castillo: “Calderón Sol fue el mejor presidente del siglo XX de El Salvador”

El excoordinador del FMLN destaca su vocación de estadista y su espíritu concertador como las cualidades más relevantes del expresidente.

descripción de la imagen

Por Guillermo Miranda Cuestas

10 October 2017

La amistad sincera y el reconocimiento entre adversarios no es usual en la encrispada política salvadoreña. En esta entrevista cargada de emotividad, el legado del expresidente Calderón Sol es apreciado por quien fuera su amigo e integrara la máxima dirigencia del FMLN durante la administración del exmandatario: el doctor Fabio Castillo, un reconocido abogado que lideró esa organización de izquierda entre 1999 y 2001 y que actualmente es concejal de la Alcaldía de San Salvador.

Desde una mirada más humana, ¿quién fue el expresidente Calderón Sol?

Seguramente no soy la persona más apropiada para hablar de esto porque yo le tuve muchísimo cariño a Armando. Tengo un recuerdo maravilloso con respecto a la relación que tuvimos. Desde el punto de vista humano era, en primer lugar, un hombre muy sensible, muy interesado en los problemas de los demás, con un propósito muy firme de ayudar a quien le pudiera ayudar sin esperar nada a cambio. Un hombre educado, un hombre culto, un hombre correcto, un hombre con sentimientos nobles, muy cariñoso con su familia. Fue un hijo excepcional con su padre y con su madre. Un esposo magnífico y un padre ejemplar.

 

¿Cuál es el legado que las nuevas generaciones pueden apreciar del liderazgo del expresidente Calderón Sol?

Lo primero y principal, para mí, es que Armando llegó a la presidencia y dejó de ser el militante de un partido para convertirse en una persona que pensaba en los intereses nacionales, en los intereses del país, en los intereses del Estado. Eso es muy importante. Y lo hizo sin dejar de ser una persona del pensamiento por el que el país lo llevó a la presidencia. Eso seguramente es lo más relevante en él.

Lo segundo es que fue una persona que siempre intentó concertar, intentó conciliar. Yo no conozco esta parte, pero algún día valdría la pena hablar con las personas que estuvieron en Nueva York cuando la etapa final de los Acuerdos de Paz, porque ahí Armando tuvo un papel muy importante que desempeñar.

Gracias Dr., ¿quisiera agregar algo?

Nada más decirle que estoy realmente conmovido.

Hace más de mes y medio me invitó él a cenar en su casa y pasé un rato muy agradable con él, con su esposa, con Gerardo su hijo, con la esposa de Gerardo. Pasamos muy agusto. Fue una conversación muy fluida, muy agradable, muy cariñosa siempre. Tanto que al retirarme de su casa él me obsequió unas pequeñas cosas y yo le agradezco y las guardo con mucho cariño.