Mauricio Antonio Jordan Martínez, un policía con más de 15 años de experiencia, se dedicaba en su tiempo libre a trabajar como taxista en su carro particular para obtener más dinero y sostener a su familia.
“Lo que ganaba como policía, como a la mayoría de policías, no le alcanzaba para poder mantener a su familia”, dijo un compañero de Jordan Martínez, quien fue asesinado la noche del martes pasado en las afueras de Coatepeque, Santa Ana.
Deja en la orfandad a dos hijos, uno de 12 años y otro de seis, según amigos.
Jordan Martínez es el policía número 16 que es asesinado por pandilleros en este año. Fue acribillado a balazos en la salida del cantón San Jacinto de Coatepeque, Santa Ana.
Las autoridades policiales sospechan de que Jordan Martínez regresaba de realizar un viaje al cantón San Jacinto y al salir del mismo fue emboscado por hombres con apariencia de pandilleros que lo esperaban en una camioneta todo terreno color blanco.
El vehículo placas P-429-091, en el que viajaba Jordan Martínez, presentaba múltiples perforaciones de bala, según el informe policial. Mientras que el agente quedó en el asiento del conductor con varias lesiones de bala.
Sospecha la Policía que al agente Jordan Martínez le habrían tendido una trampa al pedirle un viaje hasta al referido cantón para luego emboscarlo.
No obstante, esa hipótesis será confirmada o descartada durante las investigaciones, según fuentes de la Policía.
Compañeros de Jordan Martínez aseguraron que él tenía unos 15 años de pertenecer a la corporación policial.
Los últimos seis años estuvo destacado en el Laboratorio Técnico Científico de la Policía como investigador de inspecciones oculares en la delegación de Policía de Quezaltepeque, en La Libertad.
De hecho, el criminalista de la Fiscalia General, Israel Ticas, expresó su indignación por el crimen de Jordan Martínez.
“Era un gran técnico y un buen ser humano, trabajamos en muchas ocasiones juntos, pero esta violencia le pasó la factura”, escribió Ticas en su cuenta de Facebook.
Agregó : “le pido a cada momento al Creador que los guarde y que cambie el odio por amor de todos los salvadoreños, para que no nos matemos unos contra otros, pues somos hermanos y juntos debemos buscar la paz”.
Para Ticas “lo que indigna es como con darles una medalla a sus familias quieren callar el dolor de su perdida, Dios guarde tu alma amigo”.
Compañeros del agente asesinado lo recuerdan como una persona tranquila, noble, y con muchos deseos de sacar adelante a sus hijos.
Agregaron que por esa razón es que él aprovechaba su tiempo libre haciendo viajes en su vehículo particular para ganar dinero extra para el sostenimiento de su familia.
El Movimiento de los Trabajadores de la Policía (MTP) al lamentar el asesinato del agente Jordan Martínez, exigieron a las autoridades policiales que se investigue a profundidad el crimen para llevar a los responsables ante la Justicia.
“Es un asesinato que tiene que ser investigado, pedimos resignación a la familia y a las autoridades que pongan todas las energías en encontrar a los culpables y que paguen por este cobarde crimen... Descansa hermano azul”, publicó el referido movimiento policial.
Por el asesinato de este agente policial, aún no se tienen sospechosos detenidos.
Desde el viernes pasado, los ataques contra policías, militares y familiares de éstos se arreciaron por parte de las pandillas.
En menos de una semana han asesinado a dos policías, dos militares y tres parientes de policías.
Además, hubo otros dos ataques contra policías, pero por fortuna, éstos resultaron ilesos.
En lo que va del año, los atentados contra agentes de seguridad pública han dejado 16 policías y ocho militares muertos. Además de un custodio penitenciario asesinado.
Policías se han quejado a través de las redes sociales de que las autoridades policiales no tienen planes emergentes de protección para los agentes y sus familias.
Las altas jefaturas de la Policía han asegurado que trabajan en una propuesta de ley con medidas de protección para los miembros de la corporación policial.