El programa de vacunación del país enfrenta una serie de desafíos y deudas para reforzar la inmunización de la población salvadoreña, consideró el presidente de la Asociación de Pediatría, Ronald Pérez.
“Nuestro programa es muy completo si lo comparamos con Centroamérica, pero ahorita tenemos que asegurar que se siga aplicando como tal y ya otros países se nos están adelantando con un par de vacunas que no han entrado todavía en el programa y es importante que estén”, expresó el especialista.
La principal vacuna que debería ingresar al esquema de vacunación del sistema de salud del país es la del Virus del Papiloma Humano (VPH), que ya ha sido introducida en Panamá y Costa Rica, dijo Pérez.
“No vemos luces aún, a pesar de que se ha gestionado mucho desde muchos frentes, ya el Comité Asesor de Prácticas de Inmunización (CAPI) dio el aval y dijo que debe ser la próxima que circule”, comentó.
Para 2013, el Ministerio de Salud planeaba incluir la vacuna contra el VPH al esquema, sin embargo, no lo logró por falta de fondos.
Pérez explicó que, lamentablemente, esta situación afecta mucho a los países de bajos ingresos, donde se puede tardar hasta 11 años la introducción de una nueva vacuna aunque ya se esté usando en el resto de países desarrollados.
“La vacuna VPH que ya demostró en países en Europa y Sudamérica la efectividad que tiene para prevenir el cáncer de cervix ya tiene siete años de estarse aplicando y aún no vemos la oportunidad de incluirse en nuestro esquema”, manifestó.
La importancia de la vacuna es mayor ante las altas tasas de embarazos en adolescentes. “Estas chicas que obviamente han iniciado sus relaciones sexuales mucho más temprano tienen mucho más riesgo de desarrollar cáncer de cervix”. El virus se transmite vía sexual y el médico recordó que está totalmente diseminado en el mundo.
Además de la necesidad de la vacuna contra el VPH, en el país también será importante incluir la vacuna contra el dengue, debido a la cantidad de personas afectadas cada año por el virus.
De igual forma, Pérez dijo que aún hace falta garantizar la vacuna contra el neumococo para todos los grupos en riesgo, pacientes inmunodeprimidos; personas con asplenia anatómica o funcional; personas inmunocompetentes con otras patologías de base, como el alcoholismo, la enfermedad cardiovascular crónica, diabetes mellitus y personas a partir de los 60 años o institucionalizadas, como en hogares de adultos mayores.
También aún hace falta incluir el refuerzo de la vacuna DPT acelular, que protege contra la difteria, tétanos y tosferina, para los adolescentes. Pérez dijo que en los últimos años ha habido un repunte de casos de tosferina en menores de seis meses, por lo que se ha decidido vacunar a las mujeres embarazadas. En vista, de la cantidad de adolescentes embarazadas también sería necesario incluir un refuerzo de la vacuna para los adolescentes.
Necesario aumento de presupuesto
Sin embargo, entre todos los retos y deudas, el más importantes es el de aumentar el presupuesto para el programa de vacunación, señaló el médico.
La Ley de Vacunas, aprobada en 2012, estableció en el artículo 21 del capítulo VI que Salud debe contar con un fondo especial adicional que sea usado exclusivamente para la compra de vacunas y los insumos necesarios para el programa de vacunación. “Dicho fondo no será menor al uno por ciento del Presupuesto General de la Nación del ejercicio fiscal anterior, para lo cual deberá establecer la partida presupuestaria correspondiente”, ordenó la ley.
En 2015, el presupuesto general de la nación fue de $4 mil 823 millones. “Por ley debería estarse presupuestando unos $48 millones, pero el fondo actual ronda los $14 millones para el 2016”, manifestó Pérez.
Ante la falta de un aumento de fondos, se limitan las posibilidades de incluir nuevas vacunas y aumentar la cantidad de población inmunizadas.
“Las vacunas que en este momento se están colocando en el Ministerio de Salud son las vacunas que cualquier niño necesita”, expresó el infectólogo pediatra, Mario Gamero, pero comentó que cada vez aparecen nuevas indicaciones para aumentar la protección.
El Ministerio de Salud lanzará esta mañana la semana de vacunación de Las Américas, llamada “Vamos por el oro”.
Gamero indicó que, en el tema de las vacunas, el costo de una prevención es mucho menor que el de un tratamiento.
“Las vacunas son la mejor estrategia en salud pública porque está dirigido a grupos de riesgo o que interesa proteger”, añadió Pérez.