Hace unos 10 años la Asamblea Legislativa pagó cerca de $15,000 por el diseño para un nuevo edificio legislativo, pero la estructura nunca se construyó por falta de fondos.
Pero ahora, tras la aprobación de $32 millones de un préstamo con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) en diciembre de 2015 para las nuevas instalaciones, los legisladores de la Junta Directiva han acordado que el diseño original debe ser actualizado.
El diputado de ARENA y directivo legislativo, Norman Quijano, quien también fue legislador en esa época en la que se acordó el diseño anterior, indicó que el estimado del costo fue casi los $15 mil y recordó que “allá por 2008” el encargado de hacer el boceto fue Hugo Barrientos.
De los detalles que se plasmaron en ese diseño varios de los diputados consultados dijeron no conocerlo porque nunca lo han visto. Pero Quijano y su colega arenera Carmen Elena Calderón de Escalón, quien también formó parte de la Directiva de la Asamblea, recordaron algunos elementos como los que se incluyen en el gráfico, entre ellos que el diseño original contemplaba un helipuerto.
Ahora lo que la Asamblea quiere es actualizar el bosquejo para el nuevo edificio y para ello necesitará fondos, ya que el dinero con el que contaría es para la construcción del edificio, cuyo crédito falta ser ratificado con 56 votos. Pero el FMLN le achaca a ARENA que se oponga al préstamo para las nuevas instalaciones.
El diputado directivo, Serafín Orantes, del PCN, señaló otro inconveniente para tener fondos para el nuevo diseño. Informó que el ministerio de Hacienda tiene atrasos en los desembolsos de dinero del presupuesto legislativo y eso ha hecho que la Asamblea también tenga mora con sus proveedores.
“Se está preparando con la parte de servicios generales y de ingeniería de la Asamblea, todavía no lo hemos sacado (a licitación), porque hace falta la partida presupuestaria, estamos atrasados con algunos pagos, la mayoría de instituciones estamos con retraso a pago de proveedores y la Asamblea es una de ellas”, explicó Orantes.
Se consultó a los diputados sobre el costo que tendrá el nuevo boceto, pero ninguno dio cuentas, pues afirmaron que la Asamblea se encuentra en el proceso de preparación de las bases de competencia para sacar el servicio a licitación, así como el de la construcción del nuevo Palacio Legislativo, el cual sería edificado en la zona conocida como La Pirámide, contiguo a uno de los parqueos de la Asamblea.
El diputado tricolor y directivo legislativo, David Reyes, explicó que el gasto para actualizar el diseño está incluido en los $32 millones del préstamo con el BCIE, pero según Orantes no pueden echar mano de ese dinero mientras no hayan adjudicado el diseño y la obra, y para eso necesitan tomar dinero de su propio presupuesto, pero debido al atraso de Hacienda no tienen fondos disponibles.
La situación se les ha complicado a los legisladores, ya que desde los terremotos de 1986 y del 2001 el edificio legislativo quedó severamente dañado y con bandera anaranjada. A eso se suma el sobrepeso que ha tenido la estructura en las últimas legislaturas, lo cual ha empeorado fisuras antiguas. Esto se debe en parte a la contratación de más personal, según reveló en noviembre de 2015 el informe del ingeniero Héctor David Hernández Flores, a quien la Asamblea contrató para hacer un diagnóstico del edificio.
“El peso es tan grande, porque han ido haciendo el doble de lo que debería resistir”, apuntó Calderón de Escalón.
Según Reyes, la recomendación del ingeniero fue que el edificio debe ser desocupado.
“A este edificio lo primero que hay que hacer es evacuarlo ¡ya!”, dijo Reyes, pero la alternativa que tenían de pasarse a las instalaciones de la CEL se les ha ido de las manos, ya que la autónoma les pide más de $50,000 de arrendamiento al mes (Leer nota aparte).
Reyes añadió que en una presentación que el ingeniero Hernández Flores hizo a la Directiva se simula la forma en cómo caería el edificio en caso de un terremoto de la misma intensidad que el del 13 de enero de 2001.
“Este edificio se parte; prácticamente el cuarto nivel, según la simulación, y quinto nivel se puede ir para un lado. Lo normal que puede oscilar el movimiento de un edificio no debe sobrepasar los 4 centímetros... Este edificio se mueve 18 centímetros”, explicó Reyes.
La presidenta de la Asamblea, Lorena Peña, también mencionó en una plenaria del riesgo que existe con el edificio legislativo, pero exhortó a no generar “pánico”.