Fallas en el sistema del duicentro en Ahuachapán han generado desde el lunes que la sucursal se encuentre abarrotada por ciudadanos que esperan que se les extienda el Documento Único de Identidad (DUI), de forma gratuita.
Ayer por la mañana, más de 350 personas realizaban dos filas a la espera de ingresar a las instalaciones. Una de ellas estaba destinada para las personas de la tercera edad y la otra para el resto de usuarios.
Ambos grupos se quejaron de que la atención es lenta, ya que empleados del duicentro solo permiten el ingreso de grupos de cinco personas cada media hora, en promedio.
Los ciudadanos pidieron a la empresa encargada de entregar el DUI y al Registro Nacional de las Personas Naturales (RNPN) que agilicen el proceso de atención, ya que desde que la Asamblea Legislativa aprobó la gratuidad, la demanda ha aumentado.
José Manuel Magaña, de 60 años, relató que el lunes a las nueve de la mañana llegó al duicentro en la cabecera departamental junto a otras cuarenta personas del caserío El Mameyal, cantón El Sincuyo, de Tacuba.
La sorpresa fue que no había sistema hasta aproximadamente las tres de la tarde, por lo que sus demás vecinos decidieron regresar al caserío. Ayer ya no volvieron al duicentro.
Él optó por quedarse pero tuvo que pasar la noche en la intemperie. Las pocas horas que durmió lo hizo en la acera de las instalaciones en la intersección de la 3a. Avenida Norte y Calle Gerardo Barrios Oriente.
“El anhelo es que nos atiendan para no pasar una noche más en el puro sereno”, dijo el sexagenario.
Guadalupe Hernández, residente de la ciudad, denunció que las oficinas del duicentro no tienen la capacidad para atender la demanda que se ha generado en los últimos días.
“El día de ayer (lunes) dijeron que se había ido el sistema y no atendieron mucho a la gente; ahora (ayer) otra vez están en lo mismo: que se les va el sistema, que no tienen sistema, que se les viene y hay tienen a los montones de gente”, lamentó la usuaria.
Algunos ciudadanos han llevado bancos plásticos para descansar mientras dura la espera, pero la mayoría debe de mantenerse en pie para no perder su espacio.
Marta Julia de Serrano, de 73 años y residente del cantón Istagapán, en Guaymango, relató que el lunes salió a las 4:00 de la mañana para ser de las primeras personas en ser atendidas, pero no logró pasar.
Ayer llegó a las 6:00 de la mañana para hacer fila nuevamente pues desea tener su DUI para lograr votar el próximo año, ya que su documento se le venció en noviembre.