Caravana de migrantes decidida a llegar a Ciudad de México

Los migrantes bloquearon brevemente el tráfico en la transitada carretera para suplicar a los camioneros que pasaban por ahí­ que los llevaran, pero ninguno se detuvo.

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05 November 2018

En la oscuridad previa al amanecer, cientos de migrantes comenzaron a recorrer este lunes la etapa más larga y ambiciosa de su caravana: casi 300 kilómetros hasta la Ciudad de México, donde esperan negociaciones entre los gobiernos de México y Estados Unidos que les permitan llegar a la frontera estadounidense.

José Hueso, un soldador de 51 años de San Pedro Sula, Honduras, dijo que no aceptará nada más que llegar a la frontera. La Ciudad de México es una escala para esperar mientras nos abren el camino para el norte?, dijo a The Associated Press.

Incapaz de encontrar trabajo en su ciudad, con una alta tasa de criminalidad, Hueso espera enviar dinero a sus dos hijos. Cubriéndose del frí­o de la mañana con un suéter donado, reflexionó sobre el largo viaje por delante.

Puede que no lleguemos a México...puede que agarramos todo el camino de un jalón.... Pero no hay que separarse de la caravana, nunca, es nuestra seguridad?.

Yuri Juárez, de 42 años y quien cerró su cibercafé en Villanueva, Guatemala, después de ser asaltado y extorsionado por miembros de una pandilla, sopesó sus opciones: solicitar asilo en México o

Estados Unidos. Yo sé que la violencia está más fuerte en Honduras. Yo sé que las posibilidades de que me den asilo en los Estados Unidos son muy bajas. Pero yo no puedo trabajar desde que me saquearon todas mis computadoras?, dijo. Incluso antes del robo tení­a que pagar 100 quetzales por dí­a (unos 13 dólares) a la pandilla para poder mantener abierto su negocio y, así­ y todo, una vez irrumpieron en su café y le robaron a todos sus clientes.

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En una ruidosa votación oral el domingo por la noche dentro de un gimnasio en la ciudad de Córdoba, unos 1.000 integrantes de la caravana de migrantes que ha estado avanzando por México rumbo al norte votaron para intentar llegar a la capital el lunes a pie o a dedo. Córdoba está a 286 kilómetros de la Ciudad de México por la ruta más corta y este serí­a el tramo más largo recorrido por la caravana en un solo dí­a desde que comenzó su travesí­a hace más de tres semanas.

La votación se llevó a cabo después de que los agotados participantes llegaron a Córdoba tras un recorrido de 200 kilómetros a través de Veracruz, un estado donde cientos de migrantes han desaparecido en los últimos años presas de secuestradores.

Los aproximadamente 4,000 migrantes prevén reagruparse en la capital mexicana, donde buscarí­an atención médica y descanso.

La caravana ha encontrado fuerza en su tamaño mientras se dirige al norte: atrae la atención, por lo que los residentes de los poblados salen para ofrecerles alimentos, agua, ropa limpia y zapatos.

Carlos Aguilera, de 37 años, llevaba en los hombros a Diana, una iguana verde que ha sido la mascota de la familia, mientras caminaba junto a su esposa, sus tres hijos y tres sobrinos que llegaron de Cholureca, Honduras.

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Aguilera le dijo a su familia que si emprendí­an el viaje lo harí­an todos, incluso la iguana.

Es una mascota, me daban mil (pesos mexicanos, unos 50 dólares) ayer pero no los quise agarrar. Me sentí­ con pesar porque no sé si la iba a querer o se la iba a comer. Hace falta el dinero, pero ella es la mascota, dijo Aguilera.

Mientras la familia camina la gente se acerca a tocar al reptil de casi un metro de largo que Aguilera lleva en la espalda.

Aunque la mayor parte de la caravana llegó el domingo a la ciudad colonial de Córdoba en la franja azucarera de Veracruz, donde fue recibida con música y bailes caribeños, algunos migrantes siguieron adelante hacia la Ciudad de México. Allí­ arribaron a un gran estadio al aire libre y se recostaron en las gradas mientras veí­an a mexicanos jugar al fútbol.

Empleados de la ciudad ofrecieron comida caliente en platos desechables a los migrantes, algunos de los cuales se habí­an subido a camiones de carga para acelerar su llegada a la capital.

Más atrás, otros migrantes que se adelantaron a la caravana principal descansaron en una iglesia en Puebla, una ciudad ubicada aproximadamente a la mitad de camino entre Córdoba y la Ciudad de México.

No está claro a qué parte de la frontera de Estados Unidos se dirigirá la caravana ni cuántos lo harán por sí­ solos.

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La mayorí­a de los migrantes siguen convencidos de que viajar en grupo es su mejor esperanza de llegar a territorio estadounidense. En su mayorí­a los migrantes huyen de la pobreza, la violencia de las pandillas y la inestabilidad polí­tica en Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua.

México se enfrenta a la situación sin precedentes de tener a tres caravanas migrantes en un tramo de 500 kilómetros de carretera entre los estados de Chiapas, Oaxaca y Veracruz. El grupo más grande fue el primero en ingresar a México y le siguió otro de unas 1.000 personas que cruzó desde Guatemala la semana pasada. Un tercero de aproximadamente el mismo tamaño el viernes vadeó el rí­o Suchiate en la frontera.

La Secretarí­a de Gobernación calculó el fin de semana que en total hay más de 5.000 migrantes actualmente en el sur de México que se mueven en caravanas o en grupos más pequeños. Indicó que en las últimas semanas 2,793 han solicitado refugio en el sur de la nación y unos 500 han pedido asistencia para regresar a sus paí­ses de origen.

El presidente estadounidense Donald Trump ha ordenado el despliegue de tropas en la frontera con México en respuesta a las caravanas. Más de 7.000 efectivos recibieron indicaciones de apostarse en Texas, Arizona y California. El mandatario tiene pensado firmar un decreto la próxima semana que podrí­a derivar en la detención a gran escala de los migrantes que crucen la frontera sur y prohibir que solicite asilo todo aquel que ingrese ilegalmente al paí­s.