Un juez del Tribunal Supremo español ha abandonado sus pedidos de extradición de seis políticos separatistas catalanes acusados de rebelión.
Uno de ellos es el expresidente catalán Carles Puigdemont, quien huyó a Bélgica para evitar el arresto y después se instaló en Alemania.
Una corte alemana sentenció recientemente que Puigdemont no puede ser extraditado por rebelión, sino solamente por malversación de fondos públicos.
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El juez Pablo Llarena dijo en un fallo publicado el jueves que revoca las órdenes de arresto internacionales de los seis, una decisión que el movimiento separatista probablemente considerará una gran victoria contra las autoridades centrales.
Los cargos derivan del referendo no autorizado que realizó el gobierno catalán el año pasado y de la posterior declaración unilateral de independencia aprobada por el Parlamento en Barcelona, controlado por los separatistas.
De acuerdo a la agencia EFE, Carles Puigdemont no podría regresar a España, donde sería detenido automáticamente, hasta pasados al menos 20 años, tiempo que tarda en prescribir el delito de rebelión.