Medallista de oro entre los 15 muertos por tiroteo en Nicaragua

El joven murió de un disparo durante los ataques que sufrieron los manifestantes, luego de la marcha de las madres en Managua

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Foto EDH/ AFP

Por Agencias

01 June 2018

El nicaragüense Kevin Antonio Coffin Reyes, medalla de oro en sambo en los pasados Juegos Centroamericanos de Managua 2017, fue uno de los 15 muertos por los ataques ocurridos entre el miércoles y ayer como parte de la crisis sociopolítica que atraviesa Nicaragua, informaron diversas fuentes.

La represión del gobierno de Nicaragua en contra de miles de nicaragüenses que marcharon en Managua también ha dejado casi 200 heridos.

Coffin, que ganó oro en los 90 kilogramos, llegó fallecido, tras ser herido por arma de fuego, al Hospital Militar Escuela “Dr. Alejandro Dávila Bolaños”, indicó el Ejército de Nicaragua en una declaración.

Por su parte, la doble medallista de judo y sambo en los pasados Juegos Centroamericanos 2017, la nicaragüense Sayra Laguna, informó a través de Facebook de que su amigo murió “en la trifulca que se realizó en la tarde” de este miércoles.

“Lamentamos su muerte de este gran amigo”, escribió Laguna, quien fue nombrada Atleta Amateur del Año 2017 por la Asociación de Cronistas Deportivos de Nicaragua (ACDN).

La muerte del joven, de 21 años, ocurrió tras los ataques al término de la denominada “Madre de todas las marchas” en la capital de Nicaragua, celebrada por sectores que exigen la salida del poder de Daniel Ortega y que terminó con un tiroteo contra los manifestantes.

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El miércoles negro

El miércoles fue el Día de la Madre en Nicaragua y las madres de los asesinados durante las protestas de abril y mayo organizaron una marcha de protesta por las principales calles de Managua, la cual fue acompañada por decenas de miles de nicaragüenses.

Minutos antes del ataque a la marcha, Daniel Ortega dijo en un acto frente a una manifestación de simpatizantes que estaba comprometido con “retomar el camino de la paz”, pero también afirmó que no se va del poder. “Nicaragua nos pertenece a todos y aquí nos quedamos todos”, dijo.

Las manifestaciones se iniciaron el 18 de abril como producto de una reforma al Seguro Social que incrementaba los aportes de los cotizantes. Sin embargo, tras más de un mes las protestas se han convertido en el pedido de salida de Ortega del poder.

Los principales líderes empresariales del sector privado en Nicaragua pidieron por carta recientemente a Ortega que lleve a cabo elecciones anticipadas para resolver semanas de disturbios mortales. El presidente respondió que Nicaragua no es propiedad privada de nadie. “Los dueños de Nicaragua somos todos los nicaragüenses, independientemente del pensamiento político, ideológico o religioso”, les respondió Ortega.

Posteriormente, la canciller Denis Moncada leyó un comunicado del gobierno que aseguraba “que esta situación de violencia delincuencial que han generado grupos políticos de Oposición con Agendas Políticas Específicas, activando formatos delictivos para aterrorizar a las Familias, constituye una conspiración que viola la Constitución de la República y pretende seguir destruyendo la Seguridad y la Vida de las Familias nicaragüenses”.

Ejército se desliga de ataques

Por su parte, el Ejército de Nicaragua, que días atrás había dicho que no dispararía contra el pueblo, aseguró ayer que “tiene control absoluto de sus fuerzas y medios” y rechazó “todo tipo de manipulación de información falsa” que sugiere su participación a favor de Ortega.

“Ante los hechos que se informan se ha manipulado este información, en tal sentido el Ejército de Nicaragua reitera su rechazo a todo tipo de manipulación de información falsa que a través de diferentes medios se divulga para tergiversar actuaciones de nuestra institución”, indicó en un comunicado.

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Por otro lado, la Conferencia Episcopal emitió ayer un comunicado en el que condenó la represión y afirmó que así no se puede dialogar, por lo que suspendieron las reuniones de la mesa de diálogo.

La comunidad internacional también condenó los actos represivos contra los manifestantes. Estados Unidos, países europeos y la Organización de Estados Americanos (OEA) repudiaron los ataques contra los manifestantes.

Nicaragua atraviesa una crisis sociopolítica que ha dejado más de 100 muertos desde el 18 de abril.

Según informó ayer el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) la cifra de víctimas asciende a 108, incluyendo los 15 muertos entre miércoles y jueves.

El recuento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) indicaba que eran 76 muertos antes del 30 de mayo; Amnistía Internacional (AI) registraba 83 y la Comisión de la Verdad, Justicia y Paz nicaragüense 85.

La mayoría de víctimas son estudiantes universitarios y civiles por disparos certeros en la cabeza.