Omar Mateen durante masacre en Orlando: "No tengo problemas con la gente negra...han sufrido suficiente"

Un testigo relata las últimas palabras del autor de la matanza

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14 June 2016

Fue el primer viaje de Patience Carter y su familia a Orlando, Florida, y buscando en Google encontraron la discoteca Pulse, en donde horas más tarde ocurría la masacre.

"Sólo pasamos a divertirnos y fue la peor noche de nuestras vidas, todo en cuestión de minutos", dijo Carter a la prensa el martes, y según detalla CNN.

Como tantos otros, Carter y sus amigos se escondieron en uno de los baños para discapacitados.

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"La gente era alcanzada por las balas, la sangre estaba por todas partes", dijo.

Luego, los disparos dejaron de escucharse, fue cuando Mateen (el autor de la masacre) cargaba su rifle que estaba atascado.

Escondidos en el baño, escucharon a Mateen llamar al 911, diciendo que "hacía eso porque quería que Estados Unidos deje de bombardear su país", (Los padres de Mateen son de Afganistán, pero él nació en Nueva York). También prometió su lealtad a ISIS.

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El atacante también gritaba si había afroamericanos en el lugar. Un hombre respondió "seis o siete". 

Mateen gritó: "No tengo un problema con los negros. Se trata de mi país. Ustedes han sufrido lo suficiente".

Patience Carter, relata momento de la masacre

También vociferaba que tenía francotiradores fuera del club, según Carter .

"Parecía que se estaba comunicando con otras personas que estaban con él ... Tal vez era que estaba trastornado, tal vez sólo hablaba consigo mismo, pero sinceramente no creía que él fuera capaz de lograr todo eso él solo", dijo Carter.

Algunas personas escaparon después de retirar una entrada de aire acondicionado. Decenas también corrieron cuando los oficiales de la SWAT utilizan explosivos y equipos de construcción para romper las paredes del club.

Carter dijo que escuchó tres explosiones. Ella podía ver los pies del pistolero y escuchar a los oficiales decirle a la gente que se alejara de las paredes. 
Una tubería rota comenzó a inundar el baño, y era una mezcla de charcos de sangre y agua.

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Carter oyó que el hombre armado le disparó a alguien. Se escuchó otro tiro y un hombre delante de ella recibió la bala. Uno de sus amigos estaba inmóvil en el suelo y ella estaba herida. Segundos después, Mateen fue abatido a tiros por la Policía.

Un miembro del equipo SWAT rescató a Carter, quien tenía una herida de bala en su pierna. Ahora se recupera en un hospital, pero nunca olvidará la noche de la masacre en Orlando en la que murieron 49 personas.