FAO vigilará la sequía en Centroamérica para alertar sobre los riesgos

Por sus efectos en la producción de alimentos y en el acceso a recursos, la sequía agrícola pone en peligro el sustento y la vida de millones de familias.

descripción de la imagen
Por sus efectos en la producción de alimentos y en el acceso a recursos, la sequía agrícola pone en peligro el sustento y la vida de millones de familias. Foto EDH/ Menly Cortez

Por

20 July 2018

GUATEMALA. Con el objetivo de contar con información georreferenciada para reaccionar rápidamente ante el riesgo e implementar actividades de prevención, mitigación o manejo de emergencias, la FAO lanzó un sistema que vigilará la seguía agrícola en Centroamérica.

Esta plataforma regional, basada en el Sistema del Índice de Estrés Agrícola (ASIS) de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, mundialmente conocida como FAO, permitirá alertar oportunamente a los países sobre los riesgos que puedan afectar los cultivos.

"La herramienta se ha construido paso a paso para Centroamérica con el acompañamiento técnico de la FAO, donde siempre encontramos una respuesta rápida y efectiva", afirmó durante la presentación en un hotel capitalino el director de Meteorología del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales, Marcio Baca.

Sin embargo, advirtió que el de este viernes es el primer paso, pues ahora los países de la región tienen que implementarla y caminar "de la mano de climatólogos y especialistas del sector agropecuario" para que pueda rendir sus frutos porque "contra el cambio climático hay que pensar globalmente, pero actuar localmente".

Agricultores desesperados por la pérdida de sus milpas y otros cultivos

Por sus efectos en la producción de alimentos y en el acceso a recursos, la sequía agrícola pone en peligro el sustento y la vida de millones de familias.

Solo en el Corredor Seco Centroamericano y el Arco Seco de Panamá hay 1.6 millones de personas que padecen de inseguridad alimentaria.

En las épocas pasadas, las sequías han dejado hasta 3.5 millones de personas en necesidad de asistencia humanitaria y para evitar esta situación esta iniciativa busca ayudar a Centroamérica, una de las regiones más vulnerables a la seca por la variabilidad climática y la exposición a fenómenos extremos.

El Comité Regional de Recursos Hidráulicos (CRRH) del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) ha trabajado conjuntamente con los servicios de meteorología de los países de la región para generar datos que permitan alertar sobre los riesgos que pueden afectar los cultivos.

Es así como se han fortalecido las capacidades de los países centroamericanos en el monitoreo y alerta temprana de la sequía con el uso de información geoespacial a través del Sistema del Índice de Estrés Agrícola (ASIS), una herramienta que ha sido entregada este viernes en Guatemala al CRRH.

Agricultura recomienda sembrar hasta mejorar condiciones de humedad

"ASIS suministra imágenes satelitales en intervalos de 10 días, con base en las cuales las autoridades nacionales y los productores pueden tomar decisiones para implementar actividades de mitigación de los efectos de la sequía", explicó el oficial de recursos naturales de la FAO, Oscar Rojas.

Al alimentarse con datos sobre el uso de los suelos y la duración del ciclo de los cultivos, el sistema permite detectar aquellas áreas agrícolas donde los cultivos muestran signos de riesgo de sequía.

Con esta información, que estará disponible en una plataforma que además permitirá intercambiar experiencias o propiciar alianzas de cooperación, se podrán tomar "decisiones oportunas" frente a la sequía y también aumentar la resiliencia de la población rural y mejorar la gestión de riesgo.

El Sistema del Índice de Estrés Agrícola (ASIS) ha sido calibrado con información de Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá, los países que conforman Centroamérica, una zona donde viven unos 50 millones de personas, la mayoría en situación de pobreza.

Y como ejemplo de la exposición de este viernes se observa que el departamento guatemalteco de Chiquimula, uno de los más afectados históricamente por la sequía, registra 30 días sin lluvia, lo que ya ha afectado a los cultivos.