El Instituto de Previsión Social de la Fuerza Armada (IPSFA) está prácticamente en la quiebra. Sus reservas actuales son apenas de $20 millones y de no ser porque el Gobierno le transferirá este año unos $46.8 millones, no podría pagar las pensiones de los militares jubilados.
El mismo Gerente General de la institución, el coronel René Díaz Argueta, lo reconoce: “Estamos en una verdadera crisis”.
El número de militares activos que aporta a la institución no es suficiente para la cantidad de militares retirados.
El año pasado se pensionaron 23,251 militares, pero el número de cotizantes solo fue de 39,140, lo que significa una relación de 1.8 cotizantes por cada jubilado, cuando lo ideal debería ser 5 cotizantes por un jubilado.
En 2015, sus reservas eran de aproximadamente $64 millones, pero el acelerado retiro de los militares y muy pocos nuevos militares cotizantes ha vuelto insostenible el sistema previsional, que se maneja de forma independiente al sistema de pensiones para la población en general.
“Las reservas han llegado aun nivel tal que ya no alcanza para poder equilibrar esa situación y por eso es que se ha solicitado al Gobierno central que suministre esa parte”, afirma Díaz Argueta.
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La institución ya recurrió a todo: ha vendido propiedades, aumentó los años de jubilación y hasta vendió su cartera de préstamos para sanear sus finanzas, entre otras acciones. Solo entre 2015 y 2017 ha vendido 17 bienes inmuebles o porciones de éstos para mantener en pie sus finanzas, según datos proporcionados a través de la Oficina de Información y Respuesta de la institución.
Pero nada es suficiente pues los egresos son cada vez más altos, tal como ocurrió en algún momento con el sistema de pensiones estatal (INPEP), que tuvo que derogarse para lograr la sostenibilidad de las pensiones.
Una vía ideal para que el sistemadel IPSFA fuera sostenible sería que las reservas acumuladas hasta hoy pudieran invertirse y generar rendimientos de hasta el 5%, con lo cual sería suficiente pagar las pensiones de los jubilados. Sin embargo el coronel Díaz Argueta afirma que los $20 millones no alcanzan para eso. “Tendría que tener reservas por $1,200 millones si quisiera pagar pensiones con el rendimiento de las reservas”, afirmó.
De no ser porque el Gobierno le transfirió $44.3 millones el año pasado, el pago de pensiones a los militares hubiera estado en peligro.
De hecho, los retrasos de pago fueron frecuentes. Antes se pagaba cada 15 de mes, pero la situación fue retrasando esa fecha hasta llegar a los últimos días de cada mes y con la salvadedad de que no hay un día específico de pago, pues están a expensas de que el Ministerio de Hacienda deposite el dinero lo antes posible.
Este año el Ministerio de Hacienda agregó al presupuesto una transferencia de $46.80 millones, una cantidad que sigue siendo insuficiente para las demandas de la institución.
Según el gerente general, este año aún harán falta $20 millones para completar el pago de pensiones durante el año.
Díaz Argueta afirmó que ya iniciaron la gestión con el nuevo ministro de Hacienda pues de lo contrario, comenzarían a tener problemas de pago en octubre.
Jaime García, presidente del Movimiento Causa Justa, que ha presionado por el pago puntual de las pensiones, espera que con la llegada del nuevo ministro de Hacienda, Nelson Fuentes, los desembolsos y la gestión de más fondos para la institución se hagan de una forma más expedita.
“Nosotros seguimos velando porque se pague a tiempo las pensiones para todos los militares en situación de retiro. Tenemos preocupación de que en septiembre ya no hayan fondos y el Gobierno no quiera asumir el costo de este instituto”, afirmó.