Real Madrid, el señor de las 12 copas

NOTA Y VIDEO - Hasta el más terco antimadridista debe aceptar que el Madrid de Zizou es un equipo de época

descripción de la imagen

Por Carlos López Vides

03 June 2017

CARDIFF. Es un Real Madrid de época. De leyenda. Debe entenderlo hasta el barcelonista más obcecado, debe asimilarlo el antimadridista más radical.

Lo hecho por la institución merengue es enorme, escrito en gigantescas letras de oro, en un capítulo más para un equipo donde ganar es tanto una obsesión como parte de su ADN, de su mística y de su forma de vivir el fútbol.

El Real Madrid de Zinedine Zidane firmó este sábado un éxito sin precedentes en la Liga de Campeones de Europa, después de vencer 4-1 a la Juventus de Turín. Retuvo así la corona por vez primera en el nuevo formato que nació en 1992, algo que jamás había ocurrido en la historia.

Lo hizo antes el gran AC Milán de Arrigo Sacchi en 1989 y 1990, pero en un esquema distinto en la competición.

Tremendo mérito para Real Madrid, porque ayer lo hizo ante una Juventus que apenas había recibido tres goles en toda la temporada de la Champions 2016-2017, que se paró en el Millennium de Cardiff con el temible trío Bonucci-Barzagli-Chiellini en la defensa, más el muro experimentado que representa Gianluigi Buffon en el arco, aún con sus 39 años.

Pero toda la fama de inexpugnable de la defensa bianconeri, capaz de frenar a un Barcelona en cuartos, se derrumbó ante los goles merengues. Fue doblete de un Cristiano Ronaldo que le tapó la boca a quienes dicen que no aparece en los momentos grandes, con Luka Modric como arquitecto silencioso para que llegara “la 12” a Cibeles, y el acierto frente al marco de Casemiro y Asensio, en teoría actores secundarios, pero que aportaron a la leyenda.

Tan felices serán los festejos en la capital merengue como amargas las lágrimas en Turín, porque para Juventus la Champions es ya un sinónimo de dolor. Para una leyenda como Buffon, campeón del mundo en 2006, es su tercera final al hilo perdida. Y “la Vechia Signora” acumula ya cinco finales consecutivas sin poder ganar la Orejona.

En cambio, el Real Madrid extiende más su reinado en Europa, al colocar otro trofeo en sus vitrinas, y se consolida, al ganar la 12, como el máximo acumulador de Copas de Europa de la historia. Ha sido capaz de ganar seis de sus últimas seis finales disputadas.

Remontada

La celebración que hoy vive el madridismo pintaba muy distinto al comenzar el juego. Quien dominó el inicio del partido fue Juventus, que ya al minuto siete había probado con tres tiros a marco, incluido un venenoso disparo de Pjanic que obligó la estirada del arquero tico Keylor Navas.

El equipo italiano controlaba los ritmos del partido, ante un Real Madrid incómodo, descolocado. Dybala asediaba, aunque impreciso; Higuaín y Mandzukic transmitían peligro.

Hasta que el Real Madrid demostró la magnífica, letal y mortífera pegada que ha exhibido a lo largo de la temporada, esa que le hizo ganar la Liga Española por sobre el Barcelona, y que hoy le permite festejar un doblete de Liga y Champions, algo que no ocurría desde 1958.

Primer tiro entre los palos de Juventus, y primer gol. Minuto 20. El francés Benzema inició la jugada desde la izquierda; pasó la bola a Cristiano, el portugués a la derecha para la entrada de Carvajal, que sacó un centro medido para que el mismo CR7 definiera con derechazo colocado, tras un leve desvío de Bonucci.

El mérito de Juventus fue reaccionar con rapidez. Siete minutos después del gol de Cristiano, Higuaín le sirvió un pase en corto a Mario Mandzukic en los linderos del área merengue, y el croata se inventó una chilena que sorprendió a Navas. Un golazo de “noches mágicas europeas” que auguraba una pelea de tú a tú en el resto del juego.

Cristiano intentó aumentar con una chilena fallida y un cabezazo “de palomita” desviado antes del descanso, y se fueron 1-1 al medio tiempo.

El complemento tuvo un inicio ríspido, con dos equipos apretando los dientes, sin dejar espacios de circulación libre. Era fútbol, pero también ajedrez. Y la partida la leyó mejor el lado merengue.

La Orejona se pintó de blanco en apenas cinco minutos. Al 61’, la zaga bianconera dejó un imperdonable rechazo frente a su área grande, y ahí apareció Casemiro para colocar el 2-1 madridista. Y cuatro minutos después, Modric anticipó una torpe salida juventina, ganó línea de fondo y sacó centro al primer poste en la cara de Bonucci, y apareció Cristiano para anticipar a Alex Sandro y definir el 3-1 frente a Buffon.

La Vechia Signora, capaz de ganar la Serie A y la Copa de Italia en esta temporada, se vino abajo. Se fue del partido. Y se terminó de derrumbar al 84’, con la roja al recién ingresado Juan Cuadrado. Hubo tiempo para que Marcelo hiciera una diablura por izquierda y sirviera el 4-1 al joven Asensio, que no perdonó.

Con autoridad, el señor de Europa levantó la 12 en manos de su capitán, Sergio Ramos. Es leyenda. Un equipo de época.