Municipal Limeño esperó siete fechas para volver a saborear un triunfo en este torneo Apertura 2018. Tuvo que ser otra vez de visita ante un rival occidental, ahora ante un FAS al que no todo le salió mal ayer por la tarde, salvo tres jugadas donde naufragaron en defensa y cedieron su segunda derrota en casa.
Llamó la atención la bajísima entrada con la que contó ayer el estadio Cuscatlán, sede de FAS para este torneo. No asomó ni al millar de personas la afluencia de público, para un equipo acostumbrado a hacer gala de su afición y a intimidar con ello a los rivales. Menos presión o menos ingreso, lo cierto es que los tigrillos no son locales en el Cusca y eso se nota cuando necesitan apelar a algo más que lo futbolístico para sacar un resultado.
Porque ayer, FAS tuvo paciencia para reponerse de un marcador adverso al inicio del partido, pero le faltó personalidad para administrar la ventaja y ampliar el marcador. En cambio, Limeño reaccionó a tiempo y las sustituciones le guiaron a su primer gane desde la jornada uno.
En familia
Desde el principio se escuchaban las arengas de Coloca a sus compañeros, las instrucciones del capitán Renderos y los gritos de los jugadores santarroseños. De fondo, el suave murmullo de una afición insuficiente para una cita como esta. Parecía que el ambiente le convenía más a Limeño, aunque también restaba presión al cuadro local.
Lo de local, claro está, fue solo protocolario.
La primera acción peligrosa del partido terminó en un gol en propia meta del tigrillo Jorge Morán. El carrilero derecho no se entendió con el guardameta y le mandó una devolución muy fuerte hacia atrás, inatajable para el argentino que estaba comprensiblemente muy adelantado de su arco. En la acción intervino además la presión del hondureño Bryan Zúniga, que ayudó a estorbar al portero fasista en la reacción.
El gol despertó el bochorno entre los aficionados. Las familias de los jugadores felinos alcanzaban a escuchar las críticas a los futbolistas. De hecho, no más de quince personas festejaron ese gol en las gradas del Coloso.
Ese tanto también permitió que Limeño retomara por más tiempo la pelota, ya fuera saliendo desde el fondo o anticipando el error de los mediocampistas de un FAS nervioso tras el autogol. Esto duró solo algunos minutos, en lo que el cuadro santaneco se reponía del shock inicial.
Sobre la media hora de partido, FAS se encontraba con más persistencia buscando el gol y un centro de Íbsen Castro por la izquierda le llegó justo a la medida a la cabeza de Stradella. "El Guille" brincó y superó en el salto a Óscar Portillo para colocar un remate a gol inalcanzable para Carabantes, que se extendió sobre su costado izquierdo para impedir la acción.
El empate devolvió un poco más la lógica a los papeles de cada equipo en el partido. Sobre los minutos finales del primer tiempo, FAS rozó la ventaja con un fallo milimétrico de Stradella frente al arco cuchero, tras un error defensivo; Limeño además tuvo antes una muy clara en una individual de Zúniga que Coloca ahogó sobre lo último.
Convencido de que había que sumarle y no restarle a esa tónica, los tigrillos salieron otra vez a adueñarse del balón en el segundo tiempo y a probar otras variantes para llegar al arco contrario. A los cinco minutos se repitió la fórmula del primer gol, solo que ahora con centro desde la derecha y un cabezazo certero de José Manuel Rivera, que conectó con un toque globeado con las redes auriazules.
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Era el momento perfecto para aventajar en el partido, pero a partir de ese 2-1 FAS perdió el colmillo para ir al frente. Pareció que quiso dosificarse y lo pagó caro, pues en quince minutos más no hizo nada productivo y en la únjca que tuvo Limeño, al 64', Yuvini Salamanca la clavó de tiro libre sobre el palo derecho de Coloca en espectacular definición. La falta provino de un codazo de Edwin Cuéllar en los linderos del área.
Quizás sabía injusto el resultado para los santanecos; dos errores, dos goles en contra. Pero aún así tuvo para desquitarse y poner el 3-2 en una jugada de pelos parados: Alfaro condujo por 3l medio y saco un tiro raso, Carabantes atajó y la dejó dividida, Stradella recogió y la estrelló suave contra el poste, la defensa se enredó pero logró despejar a tiempo antes de ver caer su marco.
Ya más tranquilos, los santarroseños entraron en el juego de FAS y decidieron esperar la suya hasta el final del partido. Un pase filtrado de bastó a Christopher Galeas, al 82' y tras ingresar de cambio, para poner un tiro cruzado al segundo palo de Coloca y firmar el 2-3 que dejó otra vez petrificado al Cuscatlán.